El comisario José Villarejo Pérez ha sido detenido este viernes acusado de los delitos de cohecho, organización criminal, blanqueo de capitales y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Este arresto se ha producido en el marco de una operación llevada a cabo por la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional, en la que además se han practicado registros en Madrid, Málaga y Valencia.
Entre los detenidos, según una nota de la Fiscalía Anticorrupción, hay otro comisario de la Policía Nacional, Carlos Salamanca (que fue comisario del Aeropuerto de Barajas), quien -al igual que Villarejo- supuestamente recibió dinero "a cambio de la prestación de servicios especializados de inteligencia, y de facilitar la entrada ilegal de ciudadanos no comunitarios en territorio español".
La investigación se ha llevado a cabo de forma conjunta con la Fiscalía Anticorrupción y ha sido supervisada por el Juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, que dirige Manuel García Castellón, ante cuya disposición serán puestos los detenidos.
Esta operación pretende desmantelar "una organización criminal cuyo principal objetivo es la reintroducción en España, y otros países de la Unión Europea, de fondos procedentes de actividades ilícitas vinculadas a la corrupción internacional en los negocios".
Entre las personas detenidas en esta operación, además de los citados Villarejo y Salamanca, se encuentra la mujer del primero, Gemma Isabel Alcalá. La fiscalía considera que los dos comisarios investigados en la llamada Operación Tándem se han prevalido de las funciones de sus cargos, "especialmente sensibles para la seguridad nacional", para obtener todo tipo de prebendas ("sumas de dinero y regalos suntuosos") a cambio de sus favores policiales, como "la prestación de servicios especializados de inteligencia" o "facilitar la entrada ilegal de ciudadanos no comunitarios en territorio español".
Cabe recordar que el polémico comisario también está siendo investigado en la actualidad en los juzgados de Plaza de Castilla por su presunta relación con una grabación en octubre de 2014 a policías y agentes del CNI en el marco del caso del pequeño Nicolás.