La instalación, localizada en el centro de la Franja de Gaza, servía de refugio a miles de palestinos desde que comenzó la guerra. Los informes preliminares dan cuenta de al menos 35 muertos, la mayoría niños y mujeres, y un número indeterminado de heridos. El ataque se produce mientras los organismos humanitarios alertan del alto riesgo de propagación de enfermedades.
En su tercera denuncia presentada ante la mayor instancia judicial del mundo, la Corte Penal Internacional (CPI), Reporteros Sin Fronteras (RSF) insta al fiscal a investigar los crímenes cometidos contra al menos nueve reporteros palestinos entre el 15 de diciembre de 2023 y el 20 de mayo de 2024, y solicita una investigación más amplia que abarque a los más de cien periodistas asesinados por el ejército israelí en Gaza.
La ONU comunica un bombardeo continuo y significativo por parte de las fuerzas israelíes, en el este de Rafah, a primera hora del jueves y durante toda la noche del miércoles. Debido a estos ataques, unas 80.000 personas han abandonado la ciudad desde el lunes, mientras que las reservas de suministros críticos, incluido el combustible, se agotan cada hora.
El titular de la ONU pide máxima contención a todas las partes, condena el ataque de drones y misiles contra Israel, el bombardeo contra instalaciones diplomáticas de Irán, los actos de represalia que impliquen el uso de la fuerza y un alto el fuego humanitario inmediato en Gaza.
Mientras las dos relatoras hablan de lo que está sucediendo en Gaza, el Ejército de Israel y los colonos judíos siguen atacando palestinos en Cisjordania. Ambas piden a los Estados miembros de la ONU a aplicar todas las medidas diplomáticas, políticas y económicas posibles, así como los procesos judiciales, para poner fin “a este horror”.
La experta de la ONU en derechos humanos en el territorio palestino ocupado pide a los Estados que cumplan sus obligaciones e impongan un embargo de armas y sanciones a Israel.
El comisionado general de la agencia para los refugiados palestinos califica la decisión como “indignante” y señala que con ella se obstruye de forma "intencional" la entrega de ayuda vital durante una hambruna provocada por el hombre.
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Mientras Israel sigue bombardeando la Franja de Gaza, el enviado para la Paz en la región da fe del impacto devastador de la guerra y urge a aliviar la crisis humanitaria. En tanto, el encargado de velar por los derechos humanos alerta del aumento de la violencia en Cisjordania y pide que se rindan cuentas sobre el asesinato de más de 500 palestinos a manos del ejército israelí.
Cerca de la mitad de los palestinos que se encontraban en Rafah, muchos de ellos llegados del resto de la Franja de Gaza a causa de los bombardeos israelíes, están nuevamente en el camino expuestos a un sinnúmero de riesgos y en la máxima precariedad, tratando de salvar su vida tras el asalto militar de Israel a esa ciudad del sur gazatí, informa el organismo de socorro para los refugiados palestinos.
Esa cifra se añadiría a los cerca de 35.000 palestinos muertos desde que comenzaron los bombardeos israelíes desde el 7 de octubre. Según los expertos, podría llevar hasta tres años recuperar los cadáveres utilizando las herramientas primitivas que tienen a mano. Por otro lado, las calles y los espacios públicos de muchas poblaciones gazatíes están sembrados de explosivos sin detonar.
La responsabilidad de Israel con la ayuda humanitaria no concluye cuando se dejan los suministros en la frontera, señalan los trabajadores humanitarios, que recuerdan que tiene la obligación de facilitar las condiciones para su entrega.
La destrucción económica de Gaza supera los 18.500 millones de dólares. Esto equivale al 97% del PIB combinado de Cisjordania y Gaza en 2022, según un informe del Banco Mundial. Los sistemáticos bombardeos de Israel han dañado todos los sectores de la economía, especialmente la vivienda.
El texto, preparado por los 10 miembros no permanentes del Consejo, ha sido aprobado con 14 votos a favor y la abstención de Estados Unidos. También exige la devolución de unos 130 rehenes secuestrados en Israel y retenidos en Gaza, y hace hincapié en la urgente necesidad de permitir que una amplia ayuda vital llegue a la población hambrienta del enclave asediado.
La resolución de EE.UU. no pedía un alto el fuego inmediato y sostenido, sino que afirmaba su imperiosa necesidad. La representante de Washington dijo que la resolución ayudaría a presionar a Hamás para que acepte un acuerdo sobre el fin de los combates y la liberación de los rehenes. El representante ruso aseguró que el texto presentado era “insuficiente para salvar la vida de los civiles palestinos inocentes” y su “único propósito es engañar deliberadamente a la comunidad internacional”.
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