03/01/2018@12:47:52
Adiós a la esperanza. Tras los resultados de las pasadas elecciones del 21-D, Cataluña no podrá recuperar la tan anhelada normalidad. Desmoraliza constatar hasta que punto el maldito “procés” ha conseguido nuevamente fanatizar a la sociedad catalana, parte de cuyos electores han renunciado a juzgar y examinar la desastrosa gestión de sus líderes, a los que siguen favoreciendo con sus sufragios, a pesar del daño económico y social que ha ocasionado el desastroso secesionismo.