Rivera, que abrió el debate, comenzó diciendo que “se respira ambiente de cambio” y hace falta un nuevo proyecto común para España, con tres patas: una de valores civiles con igualdad, libertad, solidaridad, unión y pertenencia a la UE; otra económica para recuperar a la clase media trabajadora y crear y distribuir riqueza, vinculada a la educación y la I+D, para recuperar a los que se han quedado en el camino y a los que han tenido que irse de España, y otra política e institucional con separación de poderes y una Ley Electoral más justa, una cámara institucional que funcione, al contrario que el Senado, y menos burocracia. No sólo hace falta quitar al PP y el PSOE, hace falta un proyecto común. La gente tiene más ganas de cambio que miedo al cambio”, concluyó.
Por su parte, Iglesias calificó de histórico el debate, cara a cara y donde no se pactan las preguntas, y lamentó enormemente la ausencia de Rajoy y Sánchez “por lo que se pierde este país", criticó la arrogancia y barajó la posibilidad de que en este debate se juegue no la medalla de bronce, como dijo el líder socialista, sino la de oro.
El líder de Podemos auguró que estamos ante “una segunda transición", después de que la primera tuviera un éxito de consenso y concienciación, con una Constitución que trajo “avances” en democracia, en derechos civiles, en conquistas sociales y en descentralización. Sin embargo, citando al escritor Manuel Vázquez Montalbán, mencionó algunas de sus lagunas, por lecturas restrictivas a nivel territorial y presencia de elementos franquistas, impidiendo referendos vinculantes a iniciativas legislativas populares.