El Ministerio de Exteriores ha afirmado que cualquier embarcación que intente eludir el bloqueo naval impuesto por Israel será interceptada. Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión en el Mediterráneo, donde se desconoce la identidad del barco que aún navega hacia Gaza.
Las autoridades han intensificado su vigilancia sobre la Flotilla Global Sumud, cuya misión humanitaria ha suscitado una fuerte respuesta por parte del gobierno israelí. La situación se complica a medida que los activistas intentan llevar ayuda a la población de Gaza, que enfrenta condiciones críticas.
Tensiones en Barcelona
En Barcelona, las protestas contra la intercepción de la Flotilla han derivado en cargas policiales. Los manifestantes exigen el respeto al derecho internacional y la libertad de movimiento para las embarcaciones humanitarias. Las fuerzas del orden han intervenido para dispersar a los asistentes, lo que ha generado una atmósfera de confrontación.
A medida que la situación se desarrolla, tanto en el mar como en tierra, las reacciones internacionales continúan multiplicándose. Organizaciones no gubernamentales y activistas están alzando sus voces en defensa de los derechos humanos y pidiendo un cese inmediato de las hostilidades.