Sin embargo, se puede decir que no se puede hablar de una entrevista, sino de un simple monólogo en el que el empresario se negó a contestar todas las preguntas que le hizo Susanna Griso y sus colaboradores, entre los que estaban Roberto Leal y Albert Castillón. Ruiz Mateos destacó una y otra vez que hablaría si algún hijo suyo pisaba la cárcel.
La conversación entre ambos fue calentándose por momentos, hasta el punto de que el empresario llegara a afirmar que todas las preguntas que se le estaban haciendo eran auténticas chorradas. Aún así, Susanna Griso continuó la entrevista como pudo y, cuando le preguntó si cobrarían todos los afectados por el caso Rumasa, Ruiz Mateos contestó gritando "¡que van a cobrar todos! ¿Usted es sorda o qué?", a lo que la presentadora, sin salirse en ningún momento de su papel, contestó con un simple "no, yo sorda no soy".
Pero los ataques a la periodista no acabaron ahí. El empresario evitó otra pregunta respondiendo: "no me haga preguntas de quinta, de verdad. Ponga usted a una buena profesional que hable", a lo que la presentadora respondió irónicamente que encontrarían una profesional que le hiciera las preguntas que a él le apetecían.
Ruiz Mateos acusó a 'Espejo público' de que todo lo que habían dicho era mentira. "Lo dejo, lo dejo, no me habéis entendido nada", amenazaba con irse el entrevistado, ante lo cual Susanna Griso le aconsejaba que lo hiciera harta de su actitud.
Finalmente, la experimentada presentadora decidió dar por "imposible" la conversación: "Es un monólogo, sólo quería hablar él, no atiende a razones, y por lo tanto creo que es absurdo seguir intentándolo".
"¿Por qué nos concedes una entrevista si no puedemos hacer ni una sola pregunta?", se preguntaba Griso, que concluyó muy decepcionada: "Es la entrevista más frustrada de toda mi vida". Posteriormente, ya en su Twitter, continuó con su enfado: "Ni un minuto más de protagonismo a este personaje y su prole. Que hable en los tribunales".
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