La aclamada serie regresa de su parón invernal con un toque retorcidamente calmado, sin grandes carreras ni explosiones, pero sí con una tensión que recuerda a esos momentos de la ya tan lejana primera temporada que lograron enganchar incluso a un público ajeno al universo zombie.
Si algo aprendieron los personajes de The Walking Dead en el midseason de la quinta temporada es que, probablemente, nunca volverán a tener un lugar al que puedan llamar “hogar”.
Y es que, tras la trágica muerte de Beth, el destino de Rick y su grupo de sobrevivientes es incierto, sobre todo ahora que caminan por el bosque sin rumbo fijo.
En esta temporada, el ADN de todos los personajes ya no es el mismo que antes. No solo porque el virus de los caminantes está dentro de ellos, sino porque ya dejamos de ser humanos.
La violencia y el mundo podrido, ha cambiado la manera de pensar de Rick y su grupo y finalmente podemos decir que somos más peligrosos que los muertos vivientes.
Sin embargo, esta transformación es lo único que podría salvarlos de las amenazas que se avecinan.
En los videos promocionales de la segunda parte de esta temporada, se observa cuando el grupo se enfrentan a una horda de casi 100 caminantes y se topa con un peligro desconocido en un granero.
La serie podremos seguirla en canal Fox los lunes a las 10:00 pm.
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