A un día antes de la final, Guardiola dio su rutinaria rueda de prensa previa a los partidos. Con varios temas candentes en el aire como los de Cesc, la final o la falta de centrales, el técnico respondió a cada una de las preguntas.
Ante el cambio de rutina en lo referente a viajar el día del partido, el de Santpedor afirmó que había tomado la decisión de cambiarlo ya que quería concentrar más horas a los jugadores antes de una final. "Viajamos todos para estar más horas juntos. Es una final ante el rival más fuerte".
"No hay excusas cuando hay un título en juego. He priorizado el reposo de los jugadores" señaló al ser preguntado por la gestión de los minutos en los amistosos de pretemporada.
Sobre el fichaje de Cesc, que está visto para sentencia, el entrenador catalán declaró: “Todavía no está aquí. Según la información que tengo, no de 'twitter' sino del club, la negociación está avanzada, pero queda un documento por confirmar. Cuando así sea daré mi opinión. En cualquier caso, venga o no, el Barça sigue teniendo un muy buen centro del campo”.
Preguntado también por la tensión que se vivió en los clásicos de la temporada pasada, Guardiola se mostró diplomático. “Es difícil de saber. Ya fue difícil de saber el año pasado. En semis de Champions nos esperó en medio campo. En la vuelta nos vino a buscar. Es difícil saber cómo va a jugar el Madrid. Es un equipo que puede jugar de muchas formas, domina todos los registros, ya lo hizo y lo volverá a hacer”.
Como siempre, el entrenador del Barcelona estuvo muy discreto y comedido en las declaraciones previas a un partido que ya de por sí será muy intenso.
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