Su marido, otra trabajadora del centro y un paciente nigeriano se encuentran bajo vigilancia. Éste último dio negativo el lunes en una prueba de ébola, pero debe esperar al miércoles para hacerse un segundo análisis y si sale negativo se le dará el alta. La enfermera, que atendió al religioso Manuel García Viejo, contagiado por el virus de ébola en Sierra Leona, no es sospechosa de estar contagiada porque no tiene fiebre, pero sí diarrea.
Por otra parte, Sanidad tiene localizadas a 52 personas, tanto trabajadores sanitarios como del entorno de la infectada. 30 de ellas son trabajadores del Hospital La Paz-Carlos III y 22 son personas de su entorno familiar y profesionales que le atendieron en los primeros instantes en el hospital madrileño de Alcorcón. Todos ellos deben tomarse la temperatura dos veces al día y se les ha aconsejado no salir de casa.
Además, el gerente del Hospital La Paz de Madrid, Rafael Pérez-Santamarina, ha explicado que la auxiliar de enfermería tomó vacaciones un día después de la muerte de García Viejo, pero en este tiempo de descanso permaneció en Madrid, por lo que "no tuvo más contactos en el hospital", informa Efe. Aun así, la Comunidad de Madrid sigue trabajando en la localización de más personas que han tenido contacto con la auxiliar infectada.