En 2013 el número de parados aumentó en cinco millones y de seguir con las actuales políticas de austeridad, los autores del informe auguran que en 2018 habrá 13 millones de desempleados más. A día de hoy, en el mundo hay 202 millones de personas que quieren trabajar y no pueden hacerlo, lo que representa una tasa del 6% a nivel mundial.
El informe de la OIT destaca que la economía mundial, aunque ha empezado a recuperarse, lo hace de forma lenta y sin generar oportunidades de empleo. Tanto es así, que desde el estallido de la crisis en 2008, unos 23 millones de trabajadores en todo el mundo han tirado la toalla y han quedado fuera del mercado laboral "por desánimo y por llevar mucho tiempo desempleadas", según los autores.
Tampoco los jóvenes encuentran una oportunidad: alrededor de 74,5 millones de jóvenes entre 15 y 24 no tienen empleo. Si extendemos la edad hasta los 29 años, casi una cuarta parte no tiene un trabajo.