Sin embargo, parte de las causas de esas libritas de más, está en la forma en cómo nos alimentamos. Y es que, a decir verdad, la gastronomía típica de esta temporada suele tener ingredientes con un elevado número de calorías. Si a esto le sumamos un menor consumo de frutas y verduras, nos deja es una dieta descuidada.
Dicho esto, cuidar de tu peso y el de tus amistades y familia se hace una prioridad. Y aunque las tradiciones seguirán en pie, con pequeñas acciones puedes disfrutar la Navidad y su gastronomía, manteniendo la figura. Comencemos con las cestas navideñas. Un detalle que no falta en esta temporada. Si bien, ahora puedes encontrar cestas de navidad con jamón baratas, el problema no es tanto su contenido, si no la tentación de acabarnos todo el lote.
De ahí, el primer consejo para no subir de peso en Navidad. Para resistir los antojos, asegúrate que al levantarte de la mesa, sientas saciedad. Para llegar a estar sensación, nuestro sistema digestivo envía señales al cerebro que pueden llegar a tardar hasta 20 minutos. Este mecanismo de alimentación nos permitirá consumir menos calorías, gracias a que las cantidades a ingerir serán menores en un estómago “engañado”.
Es cierto que no podemos dejar de comer, por lo tanto, nuestra elección de los alimentos y calidad de los mismos, se vuelve aún más importante. Preferir un producto premium te garantiza en la mayoría de casos, un alimento mucho más saludable. Seguimos con nuestro segundo consejo: Elige jamones o embutidos magros (de 100 calorías cada 100 gramos); estos son una mejor opción a las salsas y patés ricos en grasas saturadas (que llegan a aportar hasta 600 calorías en cada 100 gramos ingeridos).
Otro factor altamente influyente en la subida de peso durante la Navidad, tiene que ver con el consumo de alcohol. Estos encuentros sociales suelen ser espacios donde los excesos afloran. Por ello es conveniente optar por copas pequeñas. Seleccionar un buen vino a la hora de acompañar las comidas con bebida, evitará que escojas bebidas de alta graduación, o cócteles cargados de azucares y calorías innecesarias. No menos importante es recordar beber de 1.5 a 2 litros de agua diariamente. Esto no solo ayudará a desintoxicar el cuerpo si no a facilitar la sensación de saciedad antes mencionada.
Por último y no menos importante: el postre y los típicos dulces de la temporada; ricos en calorías, grasas y azúcares son altamente adictivos y constituyen en gran medida, la razón del sobrepeso que adquirimos en la época navideña. La mejor recomendación, es reducir su consumo o bien reservar solo para fechas específicas. También resulta útil limitar su consumo a una o dos raciones para evitar una indigestión.