El ministro sirio de Información, Omran al Zubi, ha negado este lunes toda utilización de armas químicas por parte del régimen del presidente Bashar Asad que, ha dicho, está a la espera de las conclusiones de la misión de la ONU para saber lo que ocurrió y quién y cómo las utilizó.
En una entrevista divulgada por el canal France 24 desde Damasco, el ministro de Información ha asegurado, no obstante, que quienes utilizaron armas químicas en Siria fueron "grupos terroristas armados".
"Los responsables son los grupos terroristas", ellos fueron quienes "llevaron esas armas a Siria", ya que "ciertos países como Turquía, Arabia Saudí y ciertos países europeos" les abastecen, añadía Omran al Zubi.
En referencia al supuesto ataque químico en las afueras de Damasco llevado a cabo el pasado miércoles, en el que según la oposición siria habrían muerto más de mil trescientas personas, Al Zubi ha insistido en que "evidentemente el Gobierno no utilizó armas químicas, ni antes ni después de ese episodio".
Guerra mediática
Las regiones "donde se desarrollaron esos eventos están bajo el control de los grupos terroristas armados, no del Gobierno", por eso "no pudimos examinar antes esas regiones y ver lo que pasó" y por eso el Gobierno espera las conclusiones de la ONU "para que nos digan lo que pasó", ha mantenido.
Respecto al ataque de francotiradores perpetrado este lunes contra uno de los vehículos de los expertos de la ONU que investigan el supuesto ataque químico del miércoles, el ministro ha dicho que las autoridades sirias son responsables de la seguridad de esa misión "en las regiones que controla", pero no en las controladas "por los grupos terroristas armados".
También este lunes, desde El Cairo, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), el mayor grupo opositor del país, acusa a su vez a las milicias del régimen sirio de disparar contra la misión de la ONU.
En declaraciones a France 24, el ministro sirio precisaba que la delegación de la ONU tiene toda libertad para desplazarse en la periferia de Damasco por "la lista de sitios" que facilitó, es decir "donde hubo alegaciones de usos de armas químicas el miércoles pasado".
Los expertos de la ONU han visitado este lunes la población de Muadamiya, donde según la CNFROS murieron al menos 1.300 personas en un ataque químico del régimen, y donde Médicos Sin Fronteras (MSF) confirmó 355 muertos con síntomas neurotóxicos.
Muy crítico con los medios occidentales, incluido France 24, el titular sirio de Información ha considerado al régimen y al Estado sirio víctima de una "guerra mediática" por parte de "ciertos países como Francia, Turquía, Estados Unidos y Arabia Saudí" que "no tienen en cuenta" sus declaraciones.
Atacados por francotiradores
Los expertos en armas químicas de la ONU lograron entrar en uno de los lugares supuestamente atacados con gas venenoso la semana pasada en las afueras de Damasco. Los enviados están estudiando algunos de los lugares y edificios bombardeados y realizaron pruebas a las víctimas, tales como la recogida de toma de muestras de sangre y de pelo, dijo un médico en la localidad de Mudamiya, en el sudoeste de la capital y controlada por los rebeldes.
El convoy de expertos entró por una calle bloqueada por personal de la fuerza aérea siria en este suburbio de mayoría suní que está asediado por fuerzas leales al presidente sirio Bachar el Asad.
"Nuestros médicos y los inspectores están hablando con los pacientes y tomando muestras de las víctimas", dijo hablando por teléfono móvil el médico Abu Karam. Varios vídeos colgados en internet por los grupos opositores muestran al equipo de la ONU hablando con lugareños y médicos. Horas más tarde, el equipo regresó a su hotel de Damasco.
Los investigadores lograron entrar en Muadamiya, que está en manos de la oposición, tras cinco intentos frustrados y un ataque contra su convoy, según el portavoz del centro de prensa de la localidad.
La ONU denunció en un comunicado el ataque de francotiradores contra uno de los vehículos, que quedó inutilizado por los disparos, lo que obligó al equipo a esperar para reemplazarlo.
El Gobierno sirio acusó a "grupos terroristas armados", como suele denominar a los rebeldes, de tirotear a los miembros de la misión, mientras que la Coalición Nacional Siria (CNFROS), el mayor grupo opositor, acusó a las milicias del régimen sirio de ser los autores de los disparos.
Había sido declarado un alto el fuego
Naciones Unidas anunció que Damasco había aceptado un alto el fuego mientras los expertos se encuentran en el lugar para las inspecciones. Activistas dijeron que los rebeldes también habían acordado detener las operaciones y varias brigadas ofrecerían protección al equipo de la ONU.
Pero mientras un activista hablaba con Reuters vía Skype, el sonido de la explosión de granadas de mortero se podía oír en la distancia, enfatizando los peligros y dificultades que los inspectores pueden afrontar cuando tratan de investigar.
El régimen de Bachar al Asad es el responsable
Para Estados Unidos, es "innegable" que el régimen de Bachar al Asad fue el autor del ataque químico en Siria de la semana pasada. El secretario de Estado, John Kerry, lo ha calificado de crimen "muy serio" para el que EEUU prepara una respuesta.
"Sabemos que el régimen sirio sigue teniendo la custodia de las armas químicas", manifestó Kerry, quien agregó que "pese a las excusas (del régimen de Al Asad) de que es algo inventado, (el uso de ese armamento contra civiles) es innegable" que sus fuerzas lo han empleado.
El jefe de la diplomacia estadounidense, que hizo esta declaración en una comparecencia no prevista, dijo que Washington esperará a las investigaciones de Naciones Unidas sobre el ataque, pero que EEUU tiene pruebas adicionales de un ataque con armas químicas, una agresión que el presidente Barack Obama fijó como una "línea roja" en el conflicto.
Demasiado tarde
Asimismo ha cuestionado la "credibilidad" del régimen sirio al destruir pruebas y retrasar las investigaciones y ha declarado que si Al Asad no tenía nada que ocultar, no se entiende por qué ha complicado el trabajo de los expertos de Naciones Unidas.
Para Kerry, el ataque, producido el pasado 21 de agosto a las afueras de Damasco, debería "sacudir la conciencia del mundo", toda vez que supera "todos los códigos de moralidad" y supone una "obscenidad moral".
En su opinión, el supuesto bombardeo sobre la población civil "va más allá de lo que implica el conflicto sirio", iniciado hace dos años y medio por lo que ha advertido de que no se puede cometer violaciones de este tipo "sin consecuencias", recordando asimismo el compromiso de Obama para evitar la proliferación de este tipo de armamento. El régimen dispone de estos equipos y "tiene la capacidad" de utilizarlos- señalaba a continuación.
Por todo ello, el jefe de la diplomacia norteamericana ha hablado con su homólogo sirio para pedirle explicaciones por el ataque y solicitarle acceso para los investigadores de la ONU.
Pero en lugar de acceder de forma inmediata, "puso impedimentos y destruyó pruebas", lo que hace que cualquier colaboración llegue "demasiado tarde", ha dicho Kerry. Este "intento cínico", ha añadido, "no es el comportamiento de un Gobierno que no tiene nada que ocultar".
El secretario de Estado ha subrayado que "es muy tarde" para que el régimen de Al Asad parezca "creíble" ante la comunidad internacional.
Gran Bretaña y Francia también apuntan a Al Asad
El primer ministro británico, David Cameron, y el presidente de EEUU, Barack Obama, han prometido una contundente respuesta si se prueba que el régimen sirio de Bachar al Asad empleó armas químicas contra su propia gente, informó Downing Street en un comunicado
Por su parte el presidente de Francia, François Hollande, aseguró que todas las pruebas apuntan a que el ataque ocurrido este miércoles en un área cercana a Damasco fue químico, y a que el régimen de Bachar al Asad es el responsable.
Un comunicado difundido por el Elíseo tras una entrevista telefónica mantenida por Hollande con el primer ministro australiano, Kevin Rudd, destacó que el presidente cree que "ya hay un manojo de pruebas que indican que el ataque del 21 de agosto fue de naturaleza química".
Asimismo, según el jefe del Estado, "todo conduce a considerar al régimen sirio como responsable de ese acto incalificable", en el que según la oposición habrían muerto más de 1.300 personas.
El presidente recordó la determinación de Francia para no dejar que ese acto quede "impune". Este jueves, el ministro galo de Exteriores, Laurent Fabius, afirmó que en caso de confirmarse que se trató de un ataque químico, iba a ser necesaria una respuesta de la comunidad internacional, y no descartó que esta fuera "de fuerza".
Rusia teme una nueva intervención como la de Irak en Siria
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, vertió este lunes duras críticas contra Occidente por un discurso cada vez más inclinado a una intervención militar en Siria y dirigido casi exclusivamente en contra del régimen de Damasco.
Lavrov advirtió de que las declaraciones de algunos altos cargos en Washington, Londres y París recuerdan inevitablemente a las semanas previas a la guerra de Irak en 2003, cuando una coalición liderada por Estados Unidos invadió ese país sin autorización del Consejo de Seguridad de la ONU. "Lacampaña del miedo ya ha empezado, y así empezaron los acontecimientos en Irak hace diez años", dijo el jefe de la diplomacia rusa en una rueda de prensa convocada con carácter de urgencia.
Lavrov criticó a los países de Occidente por que acusan al régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, de haber "traspasado la línea roja", sin presentar pruebas del presunto ataque con armas químicas en la periferia de Damasco que, según la oposición, habría matado la semana pasada a más de mil personas. El ministro ruso subrayó que Estados Unidos, Francia y Reino Unido hablan oficialmente de la existencia de "pruebas irrefutables" del uso del armas químicas por las autoridades sirias. "Hasta ahora no pueden presentar estas pruebas, pero señalan que la 'línea roja' se ha traspasado y no se puede perder más tiempo", precisó Lavrov.