En concreto, las pernoctaciones de viajeros residentes en España aumentaron un 6,7% y las de los no residentes lo hicieron un 2,7%. Por su parte, la estancia media bajó un 1,3% respecto a febrero de 2014, situándose en 2,9 pernoctaciones por viajero.
Durante los dos primeros meses de 2015 las pernoctaciones aumentaron un 4,2% respecto al mismo periodo del año anterior.
Andalucía, Madrid, Comunidad Valenciana y Cataluña fueron los destinos principales de los viajeros residentes en España en febrero, con tasas anuales de variación en el número de pernoctaciones del 10,3%, 6,2%, 5,5% y 12,2%, respectivamente.