Cuando tu amigo te dice que eres un lumbersexual ya no hay vuelta atrás… Esta nueva generación está cogiendo mucha fuerza y arraigándose cada vez más.
Y muchos y muchas, porque yo lo sé, aún se pregunta qué es un lumbersexual. No es nada erótico festivo, no me vayan a pensar mal, se trata de todo lo contrario a lo que conocemos como metrosexual: hombres desaliñados, de barbas pobladas, pelo en pecho, con camisas de cuadros en contacto con la naturaleza y su ser interior… vamos, lo que solemos llamar leñador, los típicos que ves y dirías que no han tardado ni dos segundos en prepararse para salir a dar un paseo.
Pues bien, aunque no os lo creáis llegar a tener esa imagen de “desaliñado” cuesta bastante, conseguir peinarse para que parezca despeinado cuesta y mantener esas barbas impecables tiene su trabajo, ya que para su cuidado se necesitan aceites especiales para evitar que se irrite la piel y ese picor molesto que sufrimos a veces, masajear de vez en cuando en la zona inferior de las mejillas y las patillas, el mentón y la barbilla, se trata de pelo, por lo cual hay que lavarlo, peinarlo e hidratarlo y cuando requiera ser recortada siempre se tiene que hacer en seco ya que cuando esta mojada da una sensación de que el pelo esta más largo y podremos pasarnos.
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