A partir de hoy martes, 8 de abril de 2014, Microsoft abandona oficialmente el soporte para su sistema Windows XP que tiene ya 13 años de antigüedad (fue lanzado al mercado en octubre de 2001), así como para el paquete de aplicaciones Office 2003.
Eso significa que el desarrollador ya no ofrecerá más actualizaciones de seguridad ni soporte técnico, y los ordenadores que mantengan este sistema, según Microsoft, serán vulnerables a virus, software espía y otro tipo de software maligno que puede robar o dañar los datos e información. Además, según Microsoft, los programas antivirus tampoco podrán proteger totalmente los sistemas una vez que el sistema ya no está soportado.
Sin embargo, con el 27 por cien de los PC (unos 4 millones en España) usando todavía XP y nada menos que un 32 por cien en los puestos e trabajo, parece que Microsoft ha dejado algunos resquicios para mantener al menos una mínima seguridad. Así, Microsoft mantiene hasta julio de 2015 las actualizaciones anti malware para los usuarios que tenga instalado Microsoft Security Essentials.
Curiosamente, el soporte para Windows XP no finaliza para todo el mundo, y Microsoft ha aceptado un cheque de 5,54 millones de libras del gobierno de Reino Unido, y unos 3 millones de euros del gobierno de Irlanda para extender este soporte durante un año más para mantener las actualizaciones de seguridad necesarias y críticas para Windows XP, Office 2003 y Exchange 2003.
Si se necesita seguir utilizando Windows XP, se recomienda instalar todos los parches disponibles, limitar la conexión a Internet de los ordenadores con dicho sistema y en todo caso, usar un navegador distinto a Internet Explorer, como Firefox o Chrome que han anunciado un soporte extendido a Windows XP.
Microsoft dispone de una página web en la que explica, desde su perspectiva oficial, todo lo relativo a este fin de soporte para Windows XP con información para llevar a cabo la transición.
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