El escenario era el ideal: Kaunas, Lituania, cuna del baloncesto europeo y casa del gran Avrydas Sabonis, que fue quien entregó la copa de campeones. Tras un torneo casi perfecto, donde solo la ajustada derrota ante Turquía lo enturbia, la selección volvió a imponerse a Francia, esta vez sin que los galos se dejaran ganar. Una victoria de la deportividad, que demuestra que al final hay que ganar a todos para llegar a ser el mejor.
El partido comenzó con ambos equipos jugando al máximo nivel. Salieron sin guardarse nada y sin miedo al rival, y pudimos ver mates y buenos contraataques durante este tiempo. Parker (muy bien defendido todo el encuentro) guiaba a los suyos, mientras que Navarro era el principal estilete ofensivo de España. El catalán, a la postre, fue nombrado M.V.P. (Jugador Más Valioso) del torneo, superando a Pau Gasol. Increíble el nivel mostrado por “Juanqui” dutante todo el Eurobasket, siendo la clave del equipo y con un acierto en el tiro que le coloca como uno de los mejores escoltas europeos no ya del momento, sino de toda la historia.
La alternancia en el marcador se vio rota en el segundo cuarto. Aunque Francia no llegaba a descolgarse del partido, España era quien llevaba la iniciativa en el luminoso. Ricky sufrió un golpe en la cara en este periodo, lo que trastocó las rotaciones de Scariolo. Ibaka demostró su mejora en los últimos partidos, y en una salida explosiva colocó dos tapones e hizo alguna buena acción en el aro rival. Por parte francesa, Parker anotaba, apoyado en Batum y Biaw, los mejores del partido junto al base.
La segunda parte siguió la misma tónica, con España cogiendo pequeñas ventajas en el marcador, que ya mantendría hasta el final. Pau y Marc dominaban completamente la zona, y aunque los galos respondían con triples, no podían igualar el nivel de juego de los nuestros.
Los últimos dos minutos fueron una fiesta para los españoles. Salieron Claver y Felipe, que todavía no habían jugado, y el partido ya estaba ganado. Todos los jugadores celebraron el triunfo en los vestuarios hasta que Felipe Reyes (en un precioso gesto por parte de sus compañeros, de sus amigos) levantó el trofeo que les acreditaba como mejor equipo de Europa.
Navarro fue nombrado MVP y mejor escolta del torneo. En este quinteto ideal le acompañaron el macedonio Bo McCalebb, Tony Parker, Andrei Kirilenko (que en un partido agónico consiguió la medalla de bronce para Rusia) y Pau Gasol. Macedonia, la gran sorpresa del torneo, se conformó con el cuarto puesto al caer contra Rusia.
Por tanto, España revalida titulo y se asegura presencia en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, donde intentará igualar o mejorar la plata conseguida hace ahora 3 años. Lo que ahora queda es disfrutar de este EQUIPO de jugadores que están haciendo leyenda, y que posiblemente no se repita en muchos años.