“A Feijóo le interesa decir que a España le va mal” porque cree que así le va bien a él, ha defendido Lastra. Pero la realidad es que pese a haber pasado una pandemia y pese a tener una guerra en las puertas de la Unión Europea, los datos de la economía española hoy son mejores que los que dejó el PP. Hay récord de trabajadores, contratos estables a nivel histórico, hay mayor crecimiento y más exportaciones.
La número dos de los socialistas ha recordado que también “hay más reconocimiento europeo” e internacional con el PSOE. Este mismo martes, Pedro Sánchez era preguntado en el foro de Davos por el buen resultado económico de España. Un halago que se suma al que hizo unos días atrás la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, poniendo a nuestro país como modelo.
El estilo Feijóo: mentir mucho y trabajar poco
Esta es la realidad de España que Feijóo intenta tapar cuando “miente sobre el crecimiento económico” pese a prometer una oposición honesta; cuando dice querer una política alejada del extremismo pero le contradicen sus insultos, descalificaciones y mentiras sobre el Gobierno; cuando dice defender la España constitucional y autonómica pero mete en los gobiernos a quien pisotea la Constitución y a quien quiere acabar con las autonomías. El líder del PP ha llegado a decir que la Constitución no es algo al servicio del consumidor pero a la vez se niega a reformar el Consejo General del Poder Judicial.
En todas estas contradicciones ha caído este mismo miércoles, en su toma de posesión como senador, en lo que Lastra ha calificado como el “estilo Feijóo”. Una forma de hacer política que repite la misma estrategia que la de Casado: mentiras y mensajes cenizos, pero algo más lento. Un estilo que también se caracteriza por parecer estar de vacaciones en vez de trabajando.
“En dos meses, Feijóo ha tomado solo dos decisiones de calado político, una al mes”, ha contabilizado la Vicesecretaria General. Pero hubiera sido mejor que no tomara ninguna. Hasta ahora, su legado se basa en tapar la corrupción de su partido y entregar el Gobierno de Castilla y León a la extrema derecha.
El PP, el partido de la mentira
Con la renovación en su liderazgo, “el PP se ha convertido en el partido de la mentira”, ha juzgado Lastra, para añadir que “respetar las instituciones y la democracia empieza por cuidar la verdad”. “Cuando la mentira ocupa el espacio y el discurso público, la democracia y las instituciones se resienten”.
Lastra ha lamentado que los dos meses de Feijóo como líder del PP se caractericen por sus insultos, sus mentiras y sus ausencias públicas. “Esperamos que Feijóo normalice su actividad política” por fin, ha sentenciado Adriana Lastra.