La Federación Española decidirá hoy la sede en la que se disputará la final de la Copa que enfrentará al Athletic y al Barcelona.
Ambos equipos pidieron de manera formal que se disputara en el Santiago Bernabéu, aunque el Real Madrid no tiene intención de ceder su estadio. Valencia y Sevilla son las dos ciudades que se han ofrecido.
La sede no es el único punto polémico que tendrá la final. La posibilidad de que el himno español sea pitado por los aficionados vascos y catalanes que acudan al partido, ha generado un intenso debate.
Miguel Cardenal, secretario de Estado para el Deporte, afirmó este martes que “los silbidos al himno español y al Rey son totalmente inaceptables y son un germen de violencia".
Desde diferentes frentes políticos se ha pedido que si hay pitos se suspenda la final.