Un portavoz de la Generalitat desmintió el encuentro con el siguiente tuit: "El presidente Mas está en el Palau trabajando en un día en el que no tiene agenda pública".
La supuesta reunión adelantada por La Vanguardia, que se apresuró a eliminar esa información de su página web, venía a coincidir con un breafing en Moncloa para el que había sido citado un grupo de periodistas.
"Es la primera noticia que tenemos" dijo un portavoz al que se le preguntó por la supuesta reunión aunque no llegó a desmentir que el encuentro se hubiese producido.
De hecho, se remitió al desmentido de la Generalitat sin confirmar ni desmentir reuniones anteriores: "Forman parte de la agenda privada del presidente"
Esta hubiera sido la primera reunión personal desde el pasado verano, cuando Mas viajó a la Moncloa para tratar asuntos económicos o la reunión del Foro Euromediterráneo en Barcelona.
De esta forma, permanece pendiente un encuentro que ya ha sido anulado en una ocasión a debido al anuncio del pacto por la fecha y la pregunta de la consulta, acordada por CiU, ERC, ICV y la CUP y fijada para el 9 de noviembre la celebración del referéndum.
Según el Gobierno, este anuncio fue el que habría llevado al traste el encuentro. Rajoy reconoció recientemente en una entrevista en Antena 3 que no había vuelto a hablar con Mas desde que se convocó la consulta catalana y que no tenía ninguna intención de tomar la iniciativa.
Cambio constitucional
El portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, ha admitido la posibilidad de que todos los españoles acaben votando un cambio de estatus de Cataluña si el resultado de la consulta de autodeterminación y la posterior negociación con el Estado requiere una reforma de la Constitución.
En una entrevista de la Cope ha reiterado que la consulta por sí sola no genera una situación jurídica nueva, sino que abre un período de negociación con las instituciones del Estado para ver cómo se encauza ese resultado y, si es necesaria una reforma de la Constitución, una votación del conjunto de los españoles.
La consulta "generaría un proceso de negociación donde se deberían modificar, si fuera el caso como consecuencia de este proceso, todas las leyes necesarias, incluida una reforma de la Constitución", ha explicado Homs, que ha recordado que el proceso de reforma de determinados artículos de la Carta Magna requiere que se pronuncien todos los españoles.
"Evidentemente la ley no prevé la independencia porque la Constitución dice lo que dice", ha reconocido el también consejero de la Presidencia, por lo que ha añadido que debería negociarse con las instituciones del Estado un cambio de las leyes si el resultado de la consulta fuese que una mayoría de los catalanes apuesta por que Cataluña sea un Estado independiente.