Según muchos naturistas y dietistas la avena es el alimento más óptimo para la salud. Se trata de un cereal con un alto contenido en proteínas, hidratos de carbono, fibra, vitaminas y minerales . ¿Qué no tiene? Grasas. La avena tiene un contenido en grasas muy bajo. Además ayuda a bajar el colesterol y los azúcares, al mismo tiempo que te hace ir al baño. Para los que lo utilizan en su dieta, es un gran aliado ya que tiene un efecto saciante. Pero, ¡Cuidado! Tomado en exceso la avena puede ser demasiado para tu estomago, así que con una o dos cucharadas al día tendrás más que suficiente.
Si no conocías este cereal tan completo y no sabes como añadirlo a tu dieta, nosotros te animamos que lo pruebes en todo tipo de platos; en el desayuno o la merienda lo puedes incluir combinándolo con leche, yogurt, frutas troceadas, miel, canela, o con frutos secos. En la comida o la cena, lo puedes mezclar con tus ensaladas, con la harina para hacer creepes o panecillos, etc.
La avena también tiene propiedades medicinales, ya que un alimento fuertemente diurético. Es muy recomendable para las personas que padecen enfermedades relacionadas con el aparato respiratorio, como tos o bronquitis y también para las personas que sufren ansiedad (por su efecto saciente). Por lo tanto, resulta un calmante muy útil en fases de nerviosismo, insomnio o estrés.
Por último, no hay que olvidar que la avena también es interesante desde el punto de vista estético. Sus propiedades nutritivas, regenerantes y calmantes la convierten en un producto ideal para cuidar tu piel. En muchos puntos de venta de estética, pero sobre todo en farmacias, herbolarios y tiendas ecológicas puedes encontrar infinidad de productos elaborados con avena (jabones, cremas, geles, lociones, champús…).
La verdad es que nunca había leído tantas propiedades y comentarios a favor de un alimento. Será cosa de probarlo ¿no?