El Gobierno ha decidido, tras angustiar a nuestros pensionistas durante meses, que no aplicará de inmediato el factor de sostenibilidad que provocaría un serio reajuste en las pensiones, sino que lo pospondrá unos 4 años.
La ministra de Empleo, Fátima Báñez, presenta este viernes en el Consejo de Ministros un informe en el que contempla que la entrada en vigor de la reforma se aplace hasta los últimos años de la próxima legislatura, es decir, un mínimo de 4 años.
Los técnicos de la Seguridad Social ultimaban ayer el nuevo documento, en el que se respetan algunas de las conclusiones del informe, aprobado con sólo un voto en contra, mientras que otras serán muy matizadas.
Los expertos, liderados por el sociólogo Víctor Pérez–Díaz, habían insistido en que el factor de sostenibilidad, que iba a implicar un ajuste paulatino de las pensiones por el aumento de la esperanza de vida de la población, debía entrar en vigor en enero de 2014 para ganar en efectividad. Según sus cálculos, si sigue el actual ritmo de déficit, el fondo de reserva de la Seguridad Social sólo tiene recursos hasta 2019.
Pero fuentes oficiales dan por seguro que el nuevo documento planteará que el factor de sostenibilidad no entre en vigor hasta los últimos años de la próxima legislatura. Las siguientes elecciones generales se celebrarán en otoño del año 2015, por lo que el factor se aplicaría solamente dos años antes de que el fondo de reserva de la Seguridad Social se quede sin recursos, si la economía no consigue repuntar.