NACIONAL

Una dura vuelta de unas exiguas vacaciones

David Rodríguez | Jueves 16 de octubre de 2014

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el coordinador federal de IU Cayo Lara regresan a sus puestos de trabajo tras unas prácticamente inexistentes vacaciones.



Arranca de esta manera la última semana de agosto, ya prácticamente a pleno rendimiento, puesto que también se reunirá la Diputación Permanente y el primer Consejo de Ministros tras las vacaciones.

La agenda oficial de Rajoy incluye el Consejo de Ministros del viernes y el tradicional acto de apertura del curso político organizado por el PP que se celebrará de nuevo en Soutomaior (Pontevedra).

Mientras tanto, el líder de la oposición preside una reunión del grupo de trabajo sobre educación del PSOE con el fin de preparar la estrategia educativa de su partido de cara al inicio del curso 2013-2014 que pasa por combatir el "retroceso" que ve en la reforma del Ejecutivo, especialmente los recortes en becas.

Cayo Lara también se reúne con su equipo para analizar la actualidad política y económica con especial atención a la Diputación Permanente del día siguiente en la que IU, entre otras cosas, pedirá un pleno extraordinario para que Rajoy explique "sus contradicciones" sobre el caso Bárcenas.

Rajoy abordará una mini reforma de su Consejo de Ministros

El presidente del Gobierno regresó ayer de sus vacaciones con todas las miradas puestas en él para tratar de averiguar sus intenciones con respecto al futuro de los miembros del Gobierno y del PP.

El verano ha sido prolífico en informaciones sobre los cambios naturales en el Ejecutivo que se prevén por la celebración de las elecciones europeas para mayo de 2014, pero también sobre otra remodelación que vendría forzada por el desgaste de la cúpula conservadora que han provocado sus implicaciones en el caso Bárcenas-Gürtel.

En este sentido, el Consejo de Ministros de Mariano Rajoy se mantendría casi en su totalidad al margen de la quema por la corrupción, en buena parte, gracias a la estrategia de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, volcada en trasladar la imagen de un Gobierno que se limita a trabajar en reformas y medidas anti-crisis y está completamente aislado de los asuntos del partido.

Bueno, salvo en un caso: el de la ministra de Sanidad, Ana Mato, cuyo nombre se encuentra tal vez demasiado fuertemente vinculado a la trama corrupta de Francisco Correa a través de su exmarido Jesús Sepúlveda, con quien Mato estuvo casada cuando los negocios de la Gürtel con el PP eran más rentables.

Mariano Rajoy estaría por lo tanto dispuesto a entregar la cabeza de su ministra de Sanidad en el contexto de una minicrisis de Gobierno que, según señalan mayoritariamente en el PP, colocaría al titular de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en la candidatura del PP a las europeas y previo paso a hacerse comisario en Bruselas.

Y es que Miguel Arias Cañete ya ha trasladado en diversas ocasiones su deseo de acceder a este puesto y trabajar de nuevo en la capital belga (fue diputado en el Parlamento Europeo durante doce años, entre 1987 y 1999), y además, Cañete es el ministro del Gobierno mejor valorado por la opinión pública en estos momentos por lo que el PP, en un momento en el que se juega mucho en la celebración de los primeros comicios desde que el caso Gürtel se amplió al caso Bárcenas y tras los reiterativos incumplimientos de las promesas electorales, estaría más que dispuesto en mandarle a él a Europa para garantizar unos mejores resultados electorales.

Otras voces en el PP, sin embargo -y aunque son pocas-, sitúan a Javier Arenas al frente de la lista europea en una maniobra del presidente para apartarlo de la cúpula del partido sin dejarlo con las manos vacías.

Y es que la implicación del actual vicesecretario general de Política Autonómica y Local del PP en el caso Bárcenas es tan fuerte como la del propio Rajoy, pero el jefe del Ejecutivo no puede caer y el expresidente del PP andaluz -según sus propios compañeros- tiene todas las papeletas para salir de la dirección nacional del partido, toda vez que la secretaria general busca su salida desde hace tiempo, recuerdan los conservadores.

María Dolores de Cospedal y Arenas chocaron estrepitosamente en su opinión sobre la forma de hacer frente a la situación laboral de Luis Bárcenas en el partido y mientras la presidenta de Castilla-La Mancha era partidaria de echarlo desde que en 2009 tras su imputación por Baltasar Garzón, el andaluz optó por pactar con él -con la aprobación de Rajoy- "una simulación en diferido" de salario.

Sólo los cambios inevitables e imprescindibles

Las últimas declaraciones públicas de los dirigentes del PP, parecen indicar que habrá cambios en el partido, aunque se harán "paulatinamente", conforme a la secretaria general, y sin una "remodelación dramática", según afirmó Carlos Floriano durante una entrevista en Onda Cero.

El número tres del PP viene a confirmar así lo que todos los conservadores apostillan cuando se les pregunta por una renovación en el partido o en el Gobierno: Mariano Rajoy tiene sus tiempos, demasiado lentos para muchos pues es "es alérgico a los cambios", por lo que no los ejecutará salvo que sean inevitables, como en el caso de que un ministro encabece la candidatura europea del PP o las responsabilidades judiciales por corrupción de los dirigentes conservadores se hagan insostenibles. Por tanto, también cabe la posibilidad de que no se den tales cambios.

El presidente anunció ayer la convocatoria del Comité Ejecutivo Nacional para el próximo lunes, aunque la inauguración del curso político la hará Rajoy en Soutomaior (Pontevedra) este sábado. Asimismo, el PP celebrará su Escuela de Verano en septiembre y tiene prevista la Convención Nacional para octubre o noviembre.

En el PP no creen que esta apretada agenda orgánica suponga que su líder vaya a acelerar cambios en el partido o en el Gobierno, sino que la aprovechará para dar un empujón a los suyos señalándoles que su gestión va por el "buen camino".  En el otoño que entra, la legislatura atraviesa su ecuador y Rajoy está convencido de que éste constituye asimismo el punto de inflexión de la situación económica de España, a la que sólo queda remontar.

Lo que sí descartan en el PP es un Congreso Extraordinario que dé la razón a las voces que piden a Rajoy que rueden cabezas por el caso Bárcenas, también dentro del partido.

Quienes creen que la salida de Arenas podría ser el único gesto que haga Rajoy para contentar particularmente a aquéllos que desde el PP le piden renovación interna -sector que encabeza Cospedal- sostienen también que sería un cambio "sin estridencias" y conforme a los Estatutos, esto es, en el seno del Comité Ejecutivo Nacional "y a propuesta del Presidente".

Una larga Diputación Permanente para empezar el curso con fuerzas

La Diputación Permanente del Congreso, que organiza los debates de la Cámara en los periodos no ordinarios de sesiones, deberá decidir este martes por la tarde si adelanta la exigencia de responsabilidades al presidente Mariano Rajoy sobre el llamado 'caso Bárcenas' y si debate ya la creación de una comisión de investigación sobre la contabilidad del PP, así como peticiones de comparecencia de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y once ministros.

El presidente del Congreso, Jesús Posada, ha convocado la reunión a las 16 horas del martes, pero 24 horas antes no se había cerrado el orden del día dado el abultado número de peticiones por parte de los distintos grupos de la oposición. Al final se incluirán 22 puntos agrupados en 16 debates, lo que permite augurar una sesión larga.

En total, la oposición pide la comparecencia de todos los miembros del Gobierno, a excepción del ministro de Educación, José Ignacio Wert, que tiene anunciada su presencia en la Cámara al día siguiente, el miércoles, para hablar de la política de becas.

El PP se ha gastado mucho dinero en comprar silencios

El 'número tres' del PSOE, Óscar López, ha denunciado este lunes que el PP "se ha gastado mucho dinero en comprar silencios" en el llamado 'caso Bárcenas', así que ahora es el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien tiene que "romper su silencio ya".

López se ha expresado así en rueda de prensa después de conocerse que el exgerente del PP Cristóbal Páez fue despedido del partido con una indemnización cuatro veces mayor de lo que le correspondía y que su despido fue parte del acuerdo al que llegaron Mariano Rajoy y su extesorero Luis Bárcenas, según publica el diario 'El Mundo'.

Por eso, el secretario de Organización del PSOE ha instado a Rajoy a dar explicaciones "después de todo el verano paseando en silencio" mientras "pasan cosas graves en su partido", y le ha advertido de que hacer "lo que ha hecho toda la vida, esconder la cabeza como el avestruz", no le va a dar resultado esta vez porque es el propio presidente quien está en el "epicentro" del caso.

"El PP se ha gastado mucho dinero en comprar silencios y Rajoy tiene que romper su silencio ya", ha manifestado el dirigente socialista. El PSOE defenderá mañana en la Diputación Permanente su propuesta de interpelar a Rajoy en el pleno del Congreso para que "dé explicaciones sobre esta montaña de mentira y corrupción" y posteriormente votar su reprobación.

En el caso de que la mayoría absoluta del PP en el Congreso frene su iniciativa, López ha dejado claro que el PSOE seguirá actuando para buscar su reprobación parlamentaria y para conseguir una comisión de investigación en el Congreso. Es más, cree que "cada vez es más difícil que el PP diga que no" a esta comisión. El PSOE también guarda en la recámara la posibilidad de una moción de censura y sigue estudiando acciones en el plano judicial.

López ha admitido que no conoce la posición de los demás grupos de la Cámara sobre su iniciativa de reprobar al presidente en el Congreso, pero ha recordado que la mayoría están pidiendo, como el PSOE, su dimisión.

La reforma penal, ¿borrón y cuenta nueva?

Respecto a una posible reforma del Código Penal para penalizar la financiación ilegal, ha replicado que el PSOE está "dispuesto a dialogar de todo", pero antes de ponerse a ello ha emplazado al PP a aclarar qué piensa hacer con sus "20 años de financiación ilegal", si va a convertirlos en delito o si más bien, dado que el Derecho Penal no puede ser retroactivo, lo que pretende es hacer "borrón y cuenta nueva".

Y además, se ha preguntado si el PP quiere pactar con el PSOE o querellarse contra ellos por hablar de "caja B y sueldos B". "¿Qué va a llegar primero, la querella o la oferta de pacto?", ha afirmado, aclarando de paso que la querella que le anunció el dirigente 'popular' Carlos Floriano no ha llegado todavía.

UGT no es el Caso Bárcenas

El coordinador federal de IU, Cayo Lara ha dicho este lunes que el que "haya metido la mano, por no decir la pata" en el caso del supuesto desvío de fondos de la Junta de Andalucía al sindicato UGT, "que la pague", pero ha recordado que este caso no es igual que el caso Bárcenas.

Lara, en una rueda de prensa en la sede federal, ha afirmado que hay que "tener la misma vara de medir" en todos los casos de corrupción, tanto con gobiernos 'populares' como socialistas, y ha asegurado que en el caso de que se confirme el desvío de fondos al sindicato que lidera Cándido Méndez van a tener el "mismo pensamiento" que es "dirimir las responsabilidades políticas y penales" y que si se han malversado fondos se tienen que devolver.

Según el líder de IU es la organización en Andalucía la que tendrá que "valorar y cuantificar si este tema es suficiente para ir a los tribunales" ya que el caso de UGT en Andalucía está en un "ámbito concreto".

En este sentido Lara ha hablado de que el principio que tiene que regir para todos es el de "sanear la democracia" y conseguir que la sociedad tenga una "seguridad absoluta y jurídica" de que las instituciones estén funcionando "con rigor".

En todo caso, Cayo Lara ha recalcado que el tema de los fondos de UGT tiene una "envergadura diferente" y por ello "no es comparable" con el caso de PP, que lleva más de 20 años financiándose ilegalmente y que ha ganado campañas electorales gracias a la caja B de partido.

Preguntado por si este tipo de actuaciones invalidan la capacidad de UGT de defender a los trabajadores, Lara ha matizado que los sindicatos "hacen falta" porque son el instrumento de defensa de los trabajadores frente a los empresarios, y que este caso "no quita" para que esa labor siga cumpliéndose.

Movilización unitaria en Otoño

Lara también ha llamado al resto de fuerzas políticas y sociales -a "los que consideran negativa las políticas de ajuste y recortes" del Gobierno del PP- para lograr una gran movilización unitaria en otoño y ha insistido en que todo el Ejecutivo debe dimitir, empezando por su presidente, Mariano Rajoy, ya que incumple su programa electoral y ha ganado las elecciones de forma fraudulenta, debido a que el PP lleva supuestamente "más de 20 años" financiándose de forma ilegal.

Respecto a la movilización, ha señalado que IU no quiere "ningún tipo de protagonismo" y que de lo que se trata es de que han detectado que hay "muchas movilizaciones atomizadas" y por diversos "hechos puntuales" cuando el problema, "las políticas neoliberales del PP", afecta a todos.

Por ello, ha continuado, "hay que trabajar" con todo el tejido social, "como las 'mareas', el 15M o los sindicatos" y, a partir de ahí, aglutinar a los descontentos "para hacer la mayor de las movilizaciones posibles", aunque aún no hay fecha para ello.


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