El huracán Melissa, uno de los más poderosos de 2025, tocó tierra en Jamaica como categoría 5 y causó devastación en Cuba, Haití y República Dominicana, dejando al menos 24 muertos en Haití. Las intensas lluvias y vientos de hasta 200 km/h provocaron graves inundaciones y daños significativos en la infraestructura. La ONU advirtió que las sanciones económicas complican la respuesta humanitaria en Cuba, donde las necesidades superan la capacidad de respuesta del país. En Haití, se reportaron pérdidas humanas y desplazamientos masivos. Más de 700.000 niños en el Caribe han sido afectados por el desastre, lo que ha llevado a UNICEF a solicitar fondos para asistencia urgente. Las agencias de la ONU resaltan la importancia de la acción anticipatoria para mitigar el impacto de desastres cada vez más frecuentes debido al cambio climático.
El huracán Melissa, considerado el más potente de 2025 y uno de los tres más intensos en la historia de Cuba, ha dejado un rastro devastador en el Caribe. Con al menos 24 muertos en Haití, las consecuencias del fenómeno han sido severas, afectando la infraestructura y causando pérdidas agrícolas significativas. A su vez, las sanciones económicas impuestas a Cuba han complicado la respuesta ante esta emergencia, según un informe reciente de la ONU.
El meteoro tocó tierra en Jamaica como un huracán de categoría 5 la noche del 28 de octubre, antes de continuar su trayectoria hacia el norte como categoría 3. Durante su paso, provocó lluvias torrenciales y vientos que alcanzaron los 200 kilómetros por hora, impactando a Cuba, Haití y República Dominicana.
Desde La Habana, Francisco Pichón, coordinador residente de la ONU en Cuba, informó que Melissa azotó durante seis horas la provincia de Santiago de Cuba, generando graves inundaciones y daños en viviendas, cultivos e infraestructura. “Las necesidades superan con creces la capacidad de respuesta del país frente a la emergencia”, advirtió Pichón, quien también destacó que las regiones más afectadas ya habían sufrido el impacto del huracán Óscar y dos terremotos el año pasado.
Desde Puerto Príncipe, Gregoir Goodstein, coordinador humanitario interino de la ONU en Haití, reportó que Melissa “vapuleó los departamentos del sur del país”, causando lluvias torrenciales, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra. “Lamentamos la pérdida de 24 vidas humanas”, declaró Goodstein. Además, muchas viviendas fueron destruidas y miles de familias se vieron obligadas a desplazarse.
A diferencia de emergencias anteriores, las agencias de la ONU contaron con financiamiento anticipado para esta crisis. Esto permitió preparar refugios y movilizar suministros antes del impacto del huracán. “Se habilitaron varias centenas de refugios priorizando la protección de mujeres y niños”, explicó Goodstein.
Según informes de la Agencia para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Fondo para la Infancia (UNICEF), las acciones anticipatorias ayudaron a mitigar parcialmente los efectos del desastre que ha afectado a millones en la región.
De acuerdo con UNICEF, más de 700.000 niños, niñas y adolescentes han sido afectados por las lluvias torrenciales y las interrupciones en servicios esenciales como agua potable, salud y educación. “Cientos de miles de niños han visto sus vidas trastocadas repentinamente”, afirmó Roberto Benes, director regional de UNICEF para América Latina y el Caribe. “Necesitan con urgencia alimentos y acceso a servicios básicos”, añadió.
The organization has deployed teams in the four most impacted countries—Jamaica, Cuba, Haiti and the Dominican Republic—and is seeking $46.5 million to fund its initial response aimed at assisting 380,000 children and their families.
En Cuba, la FAO está llevando a cabo acciones financiadas por el Fondo Central para la Respuesta a Emergencias (CERF) por un total de 510.000 dólares. Estas acciones se centran en proteger la seguridad alimentaria y reducir pérdidas agrícolas mediante la distribución previa al huracán de semillas, sistemas de riego y materiales agrícolas que beneficiaron a más de 15.000 personas.
A su vez, UNICEF ha distribuido 1.300 kits de higiene junto con otros recursos esenciales como lonas impermeables y plantas purificadoras para restablecer servicios básicos. En Jamaica, donde Melissa causó estragos directos, UNICEF ha destinado un millón de dólares para asistir a 284.000 niños proporcionando apoyo nutricional y acceso a agua potable.
La FAO ha informado que más de 1.4 millones de personas enfrentan inseguridad alimentaria aguda en Haití, incluyendo 350.000 personas que se encuentran en fase crítica. Por otro lado, UNICEF ha distribuido kits sanitarios y equipos médicos para atender a unas 20.000 personas vulnerables.
En República Dominicana también se han registrado efectos significativos: más de 60.000 personas han sido afectadas por las intensas lluvias e inundaciones. UNICEF ha proporcionado kits sanitarios adicionales mientras colabora con el gobierno para garantizar servicios esenciales para niños y mujeres.
Las agencias internacionales subrayan que actuar con anticipación es crucial para mitigar los efectos adversos provocados por desastres cada vez más frecuentes debido al cambio climático. Luiz Beduschi, oficial político en FAO, enfatizó que estas medidas son vitales para fortalecer la resiliencia entre las comunidades más vulnerables del Caribe.
A medida que se evalúan los daños ocasionados por Melissa, queda claro que tanto la cooperación internacional como el acceso sin restricciones a financiamiento humanitario serán determinantes para facilitar una recuperación efectiva en las comunidades afectadas.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 24 | Número de muertos en Haití debido al huracán. |
| 700,000 | Número de niños afectados en el Caribe por el huracán. |
| 1,400,000 | Número de personas en Haití que enfrentan inseguridad alimentaria aguda. |
| 510,000 | Dólares destinados por la FAO para acciones en Cuba tras el huracán. |
El huracán Melissa tocó tierra en Jamaica como un huracán de categoría 5.
Se han lamentado al menos 24 muertos en Haití a causa del huracán Melissa.
El embargo económico y las sanciones financieras han dificultado la obtención de recursos para la respuesta humanitaria, excluyendo a Cuba de instituciones financieras internacionales y mercados globales.
Más de 700.000 niños, niñas y adolescentes han sido afectados en el Caribe por las lluvias torrenciales y las interrupciones de servicios esenciales.
En Cuba, la FAO está ejecutando acciones financiadas para proteger la seguridad alimentaria y reducir pérdidas agrícolas, además de distribuir kits de higiene y materiales educativos por parte de UNICEF.
Más de 1,4 millones de personas enfrentan inseguridad alimentaria aguda en Haití, incluyendo 350.000 en fase de emergencia.
Las agencias de la ONU han subrayado que actuar con anticipación es esencial para reducir el impacto de desastres cada vez más frecuentes e intensos debido al cambio climático.