La Euskal Polizia intensificará los controles de alcohol y drogas en las carreteras vascas del 27 de octubre al 2 de noviembre, en colaboración con las policías locales. Esta medida forma parte de un plan anual de vigilancia para prevenir accidentes graves. Los conductores que den positivo en alcoholemia enfrentarán sanciones que oscilan entre 500 y 1,000 euros, además de la retirada de puntos en su licencia. Las pruebas se realizarán mediante aire espirado y saliva, y los resultados positivos se confirmarán con análisis adicionales. La negativa a someterse a estas pruebas puede resultar en cargos por delitos contra la seguridad vial.
La Ertzaintza, en colaboración con las policías locales, intensificará los controles preventivos de alcohol y drogas dirigidos a los conductores entre el 27 de octubre y el 2 de noviembre. Esta iniciativa forma parte de un calendario que incluye 32 campañas de vigilancia y control de tráfico a lo largo del año, con el objetivo de prevenir comportamientos de riesgo que pueden resultar en accidentes graves.
De acuerdo con la Ley de Seguridad Vial (LSV) y el Reglamento General de Circulación (RGC), es obligatorio que todos los conductores se sometan a estos controles si son requeridos por las autoridades. La negativa a realizar la prueba puede llevar a la imputación de un delito contra la seguridad vial.
El procedimiento para el control de alcoholemia consiste en realizar dos pruebas de aire espirado, separadas por un intervalo mínimo de 10 minutos. Los márgenes de error se aplican antes de determinar el resultado final.
Si el nivel de alcohol en aire espirado es inferior a 0,25 miligramos (o 0,15 para conductores profesionales y aquellos con menos de dos años de licencia), el conductor podrá continuar su trayecto. Sin embargo, si el resultado se sitúa entre 0,25 y 0,60 miligramos, se considerará una infracción administrativa. Un nivel superior a 0,60 miligramos será calificado como un delito contra la seguridad vial.
Los agentes también están autorizados a imputar un posible delito si observan signos evidentes que indiquen que el conductor ha ingerido alcohol. En caso de un resultado positivo o si el conductor se niega a realizar la prueba, se procederá a inmovilizar el vehículo, salvo que otra persona pueda hacerse cargo del mismo tras obtener un resultado negativo en su prueba.
Las sanciones por dar positivo son severas: una infracción administrativa muy grave puede acarrear multas que oscilan entre 500 € y 1.000 €, además de la retirada de hasta seis puntos del permiso de conducir, dependiendo del nivel registrado.
En cuanto al control de drogas, el procedimiento es similar pero presenta ciertas diferencias. La prueba inicial se realiza mediante una muestra de saliva; si esta resulta positiva, se confirmará mediante un análisis posterior en laboratorio.
Un resultado positivo en este caso también es considerado una infracción muy grave, sancionada con una multa de 1.000 € y la retirada de seis puntos del carné. Estas medidas buscan garantizar la seguridad vial y reducir los riesgos asociados al consumo de sustancias durante la conducción.
| Descripción | Cifra |
|---|---|
| Sanción por positivo en alcoholemia (0,50 mg/l o menos) | 500 € y retirada de 4 puntos |
| Sanción por positivo en alcoholemia (0,50 mg/l a 0,60 mg/l) | 1.000 € y retirada de 6 puntos |
| Sanción por positivo en control de drogas | 1.000 € y retirada de 6 puntos |
| Límite de alcohol para conductores profesionales o con menos de 2 años de licencia | 0,15 mg/l |
Los controles se realizarán del 27 de octubre al 2 de noviembre.
Dar positivo se considera una infracción muy grave, con sanciones que van de 500 a 1.000 € y la retirada de hasta 6 puntos del carné de conducir.
Sí, es obligatorio para todas las personas conductoras que sean requeridas por la autoridad o sus agentes durante un control preventivo.
En caso de negarse, se le podrá imputar un presunto delito contra la seguridad vial.
El control comprende dos pruebas de aire espirado, separadas por al menos 10 minutos.
Si el resultado es positivo, se inmovilizará el vehículo, salvo que pueda ser llevado por otra persona tras realizar la prueba y dar negativo.
Se realiza mediante una muestra de saliva y, si da positivo, se confirma en un análisis posterior en laboratorio.
Un resultado positivo se considera una infracción muy grave y conlleva una sanción de 1.000 € y la retirada de 6 puntos.