El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Miguel Polo, declaró ante la jueza que fue él quien propuso enviar una alerta a la población durante la DANA, argumentando que no se estaban tomando medidas adecuadas. En su testimonio, Polo destacó la falta de acción de las autoridades, incluyendo a la consellera Salomé Pradas y al presidente Carlos Mazón, quienes no actuaron hasta horas más tarde. A pesar de advertir sobre el riesgo de desbordamiento de la presa de Forata y sugerir que se avisara a los ciudadanos para que subieran a pisos altos, la alerta se envió con retraso. La declaración revela una gestión ineficaz ante una crisis que exigía decisiones rápidas y efectivas.
La declaración del presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, ante la jueza encargada de investigar la gestión de la DANA, ha revelado una alarmante falta de agilidad en la toma de decisiones durante un momento crítico. Según su testimonio, fue él quien sugirió al Cecopi enviar un mensaje a la población para alertar sobre el riesgo de desbordamiento de la presa de Forata y recomendar que se trasladaran a los pisos altos.
Durante su comparecencia, que comenzó a las 9:30 horas, Polo explicó que interrumpió una discusión sobre las inundaciones en Utiel para advertir sobre la situación en Forata, situada en el cauce del río Magro, afluente del Júcar. En ese contexto, el jefe del área de explotación de la CHJ solicitó un escenario de emergencia para la presa. Sin embargo, tras esta intervención, se produjo una desconexión con el Cecopi que duró aproximadamente media hora.
Al retomar la conexión, Polo se mostró sorprendido al escuchar que los presentes, incluida la entonces consellera Salomé Pradas, decidieron no evacuar. En su testimonio, aseguró que "nadie había hablado de eso". Fue entonces cuando propuso enviar un mensaje a la población y se inició un debate sobre lo que significaba declarar una emergencia. El subdirector de Emergencias, Jorge Suárez, reiteró ante Pradas que tenía autoridad legal para tomar cualquier medida necesaria, incluido el confinamiento de los ciudadanos.
Polo describió como "tensa" la situación en el Cecopi debido a la inacción y enfatizó su insistencia en enviar un mensaje advirtiendo a los ciudadanos sobre el peligro. En relación al president Carlos Mazón, indicó que apareció tarde en la reunión y no asumió el control hasta las 23:00 horas. Además, mencionó que hubo tres desconexiones durante el encuentro y que Mazón permaneció callado tras su llegada.
El presidente de la CHJ también informó que supo alrededor de las 18:45 horas sobre el intenso caudal descendente por el barranco del Poyo gracias a su equipo. Aclaró que nunca afirmó que la presa de Forata iba a colapsar; más bien alertó sobre el riesgo de vertido por coronación. Tras reconectar con Emergencias poco después de las 19:00 horas, Polo constató con preocupación que aún no se había enviado ningún mensaje de alerta a la población, aunque este finalmente llegó a sus móviles a las 20:11 horas.
En ese momento crítico, Pradas leyó un texto propuesto y preguntó si era adecuado. Polo respondió en privado que no le parecía correcto pero sugirió enviar algo. Se discutió entonces enviar dos mensajes: uno para toda Valencia y otro para las comarcas afectadas. Desde la CHJ se recomendó incluir también otras áreas como Ribera Baixa y l'Horta Sud.
Finalmente, Polo recibió una llamada del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, quien indagó sobre lo ocurrido. La respuesta del presidente fue clara: "Aquí nadie toma ninguna decisión, nadie hace nada."
Miguel Polo es el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y ha declarado ante la jueza que instruye la causa penal por la gestión de la DANA.
Polo propuso al Cecopi el envío de un mensaje a la población para avisar sobre el riesgo de desborde de la presa de Forata y pedir que "subieran a los pisos altos".
El mensaje de alerta finalmente llegó a los móviles de la población a las 20:11 horas, después de que Polo insistiera en su envío.
Polo declaró que había mucho debate pero que pasaba el tiempo sin adoptar medidas, lo que generó una situación tensa ya que no se estaban tomando decisiones adecuadas ante la emergencia.
Polo explicó que Carlos Mazón apareció tarde en el Cecopi y no tomó las riendas hasta las 23:00 horas, además de permanecer callado durante gran parte de la reunión.