Un hombre fue detenido tras atrincherarse en su vivienda en la Gran Vía de Madrid, amenazando con hacer explotar dos bombonas de butano. La Policía Nacional, junto a otros cuerpos de seguridad, respondió al incidente, movilizando negociadores y ambulancias. Durante la intervención, el individuo lanzó una bombona al exterior y fue encontrado abrazado a otra, mostrando una actitud crítica. El suceso tuvo lugar en un tercer piso entre la calle Montera y la Gran Vía, donde se cerró la boca de metro más cercana mientras se desarrollaba la operación policial.
La Policía Nacional ha llevado a cabo la detención de un hombre que se había atrincherado en su vivienda, amenazando con explotar dos bombonas de butano en un edificio ubicado en la emblemática Gran Vía de Madrid.
El individuo, que presentaba heridas visibles en los brazos, se encontraba en un tercer piso de una edificación situada entre la calle Montera y la Gran Vía. La situación generó una rápida respuesta por parte de las autoridades, que enviaron múltiples vehículos policiales y ambulancias al lugar del incidente.
Fuentes informan que la Policía movilizó a un negociador, mientras que también intervinieron efectivos de la Policía Municipal, Samur y Bomberos. Durante el desarrollo de los acontecimientos, la boca de metro más cercana al suceso fue cerrada como medida de precaución.
Según los reportes, al momento de entrar las fuerzas del orden, el hombre lanzó una bombona a la calle y fue hallado abrazado a otra botella, amenazando con hacerla explotar. Su comportamiento fue calificado como crítico, lo que llevó a los agentes a proceder con su reducción y posterior detención.
Un hombre se atrincheró en un tercer piso de un edificio entre la calle Montera y la Gran Vía, amenazando con explotar bombonas de butano.
La Policía Nacional, junto con la Policía Municipal, Samur y Bomberos, se movilizaron al lugar. Se utilizó a un negociador para tratar de resolver la situación pacíficamente.
Al entrar los agentes, el hombre lanzó una bombona a la calle y fue encontrado abrazado a otra, amenazando con hacerla explotar. Finalmente, fue detenido tras una intervención crítica.
El hombre tenía sangre en los brazos y mostraba una actitud crítica durante el suceso.
Sí, la boca de metro más próxima al suceso permaneció cerrada mientras se gestionaba la situación.