El Gobierno español ha sufrido una significativa derrota parlamentaria al no lograr la aprobación de la reducción de la jornada laboral, un proyecto clave impulsado por la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La oposición, compuesta por Junts, PP y Vox, se unió para rechazar la propuesta que buscaba reducir la jornada de 40 a 37,5 horas semanales. Durante el debate, Díaz criticó duramente a Junts y su portavoz Miriam Nogueras, acusándolos de alinearse con intereses empresariales en lugar de defender a los trabajadores. A pesar de las protestas de sindicatos y el intento de presión antes de la votación, la negativa de las derechas impidió que el proyecto avanzara en el Congreso. Esta situación refleja tensiones políticas significativas dentro del actual panorama legislativo en España.
El Gobierno ha enfrentado este miércoles una significativa derrota parlamentaria al no conseguir la aprobación de la reducción de la jornada laboral, un proyecto emblemático impulsado por la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Las formaciones políticas de derecha, incluyendo a Junts, PP y Vox, se unieron nuevamente para mantener la jornada laboral en 40 horas semanales, en lugar de las 37,5 que proponía el Ministerio de Trabajo.
La votación en el Congreso no presentó sorpresas, dado que desde el lunes Junts había anticipado su voto en contra. Aunque desde el partido independentista afirmaron estar a favor de la medida, argumentaron que los términos actuales representarían un ataque directo a los pequeños empresarios.
A pesar del revés, la ministra Díaz mantuvo su determinación. Incluso dos días antes de la votación, cuando Junts confirmó su negativa, insistió en que haría todo lo posible para avanzar con la iniciativa. Sin embargo, el partido independentista tenía claro su rechazo desde el principio.
La postura contraria a la propuesta ha generado un intenso choque en el Congreso. El debate se destacó como uno de los más interesantes y acalorados en meses recientes, tanto por sus contenidos como por las formas empleadas durante las intervenciones.
A primera hora del día, Yolanda Díaz llegó al Congreso visiblemente molesta y no dudó en criticar a PP, Vox y Junts. “Hoy van a votar las tres derechas de nuestro país abofeteando en la cara a las cajeras de los supermercados. Van a votar en contra abofeteando en la cara a los hombres y mujeres que trabajan en la hostelería”, expresó con firmeza.
A pesar de sus críticas hacia las tres formaciones opositoras, Díaz dirigió sus ataques con especial dureza hacia Junts y personalizó sus reproches en Miriam Nogueras. Este tipo de confrontación nunca antes se había visto tan marcada entre un miembro del Gobierno y el partido liderado por Puigdemont. La ministra acusó a Junts de alinearse con los intereses empresariales más conservadores y no con los trabajadores.