La Policía Nacional desalojó una concentración contra migrantes en Hortaleza, Madrid, convocada por Vox y prohibida por el Gobierno. A pesar de la prohibición, alrededor de 300 personas se manifestaron exigiendo deportaciones inmediatas de menores migrantes, utilizando consignas que generaron preocupación por el posible fomento del odio. La formación política, liderada por Santiago Abascal, defendió la convocatoria como una comparecencia ante los medios en respuesta a la violación de una menor en el centro. La situación se tornó tensa con un grupo de manifestantes resistiéndose al desalojo.
Unas 300 personas se manifestaron este martes en el Centro de Primera Acogida de Hortaleza, Madrid, desafiando la prohibición impuesta por la Delegación del Gobierno de la Comunidad de Madrid. La concentración, convocada por miembros de Vox, tenía como objetivo expresar repulsa ante la violación de una menor ocurrida en el barrio.
Los asistentes portaban carteles que exigían deportaciones inmediatas de menores migrantes y coreaban consignas como '¡Menas a Marruecos!', '¡Fuera el psicópata de Sánchez!', así como 'Nuestras hijas tienen miedo' y 'Deportaciones = seguridad'. Sin embargo, la Policía Nacional procedió al desalojo debido a la prohibición, argumentando un alto riesgo de alteración del orden público y la posibilidad de incurrir en un delito de odio. A pesar de esto, alrededor de 50 manifestantes se resistieron a abandonar el lugar.
La formación política liderada por Santiago Abascal defendió su convocatoria, alegando que se trataba de una comparecencia ante los medios. En este contexto, estuvieron presentes figuras destacadas como la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Isabel Pérez Moñino, y la diputada Rocío de Meer, quienes afirmaron en redes sociales: "Allí estaremos".
A pesar del desalojo, Vox sostiene que no es responsable si las personas deciden acudir para denunciar la agresión sexual sufrida por una menor en el centro. Esta situación ha derivado en incidentes posteriores donde varios menores migrantes no acompañados fueron agredidos en las inmediaciones del centro.
Santiago Abascal ha utilizado sus redes sociales para enfatizar que su partido había organizado "una manifestación de repulsa", argumentando que otros actores políticos y sociales no han tomado acciones similares ante lo ocurrido. En días previos, Abascal calificó a la niña agredida como una "víctima de Sánchez", así como del Open Arms y del bipartidismo, acusando a todos ellos de contribuir a lo que él denomina "invasión islamista".
Unas 300 personas se manifestaron en el Centro de Primera Acogida de Hortaleza a pesar de que la Delegación del Gobierno de la Comunidad de Madrid había prohibido la concentración. Los manifestantes exigían deportaciones inmediatas de menores migrantes.
La Policía Nacional desalojó a los manifestantes debido a un veto por riesgo elevado de alteración del orden público y la posibilidad de incurrir en un delito de odio.
La manifestación fue instada por Vox, liderado por Santiago Abascal, quienes defendieron que se trataba de una comparecencia ante los medios para denunciar una violación de una menor en el centro del barrio madrileño.
Santiago Abascal afirmó que su formación convocó una manifestación de repulsa porque otros partidos y organizaciones no lo estaban haciendo. No condenó directamente las agresiones sufridas por menores migrantes tras la concentración.
La concentración se realizó como respuesta a una violación de una menor en el centro, lo que generó tensiones y protestas en el área, así como agresiones posteriores a menores migrantes no acompañados.