La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos ha denunciado la destrucción sistemática de Gaza, con 54 ataques a edificios residenciales que han causado al menos 87 muertes, incluyendo niños. La intensificación de los bombardeos por parte del Ejército israelí ha obligado a cientos de familias a huir, enfrentándose a condiciones humanitarias extremas. La Oficina advierte que estas acciones violan el Cuarto Convenio de Ginebra y constituyen una amenaza inminente de crisis humanitaria. Se hace un llamado urgente a la comunidad internacional para que presione a Israel a detener esta ofensiva.
La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos en los Territorios Palestinos Ocupados ha alertado sobre la situación crítica en Gaza, donde el control total por parte de Israel y el desplazamiento forzado de la población están generando un escenario alarmante. Según el organismo, esta estrategia podría resultar en asesinatos masivos de civiles y la devastación de infraestructuras vitales para la supervivencia.
En un comunicado emitido recientemente, se destacó que se observa una reiteración de tácticas bélicas que han conducido a matanzas masivas, lesiones severas y desplazamientos forzados, así como a arrestos arbitrarios y hambrunas. Estas prácticas han sido evidentes en operaciones militares previas en el norte de Gaza y Rafah.
Los ataques del Ejército israelí se han intensificado en las últimas jornadas, afectando particularmente al vecindario de Zaytoun en el este y sur de la ciudad. Cientos de familias, incluidos niños, personas con discapacidad y ancianos, se ven obligadas a huir sin un lugar seguro al que acudir, enfrentándose a condiciones humanitarias extremas. Muchos permanecen aislados, sin acceso a alimentos, agua ni medicinas.
Desde el 8 de agosto, la Oficina ha documentado 54 ataques dirigidos a edificios residenciales y manzanas enteras en Gaza. Estos incidentes han resultado en la muerte de al menos 87 palestinos, entre ellos 25 niños, 24 hombres y 12 mujeres. Familias enteras han sido eliminadas durante estos bombardeos.
Aparte de los ataques a viviendas, también se han registrado agresiones contra refugios temporales para personas desplazadas, incluyendo tiendas de campaña y escuelas, lo que ha dejado un saldo adicional de al menos 14 palestinos fallecidos. Las cifras presentadas son consideradas solo una fracción del total real debido a la escasez de información disponible.
A pesar de las advertencias sobre la situación crítica, el Ejército israelí continúa instando a los palestinos a trasladarse hacia Al Mawasi, al oeste de Jan Yunis. Sin embargo, esta área está saturada por personas desplazadas que luchan por sobrevivir sin acceso adecuado a recursos básicos.
La Oficina subraya que los desplazamientos forzosos no cumplen con los estrictos requisitos establecidos por el derecho internacional humanitario. Este solo permite la evacuación bajo circunstancias específicas y condiciones rigurosas.
El hecho de obligar a toda la población de Gaza a desplazarse sin ofrecer refugio adecuado o atención médica esencial plantea serias preocupaciones respecto a posibles violaciones del Cuarto Convenio de Ginebra. La falta de garantías para el retorno seguro genera inquietudes sobre una crisis humanitaria inminente.
Dada esta situación apremiante, la Oficina hace un llamado urgente a los Estados parte de los Convenios de Ginebra para que presionen a Israel para cesar inmediatamente esta ofensiva, que amenaza con provocar una crisis humanitaria sin precedentes y poner en peligro vidas humanas.
Cifra | Descripción |
---|---|
54 | Ataques contra edificios residenciales y manzanas en la ciudad de Gaza. |
87 | Total de palestinos muertos en estos ataques. |
25 | Número de niños muertos. |
14 | Palestinos muertos en ataques contra refugios de personas desplazadas. |
La Oficina ha señalado que la decisión de Israel de tomar el control total de la ciudad de Gaza y desplazar a su población podría conducir a asesinatos masivos de civiles y a la destrucción de infraestructura esencial para la supervivencia.
Desde el 8 de agosto, se han registrado 54 ataques contra edificios residenciales en la ciudad de Gaza, resultando en al menos 87 muertes, incluyendo niños, hombres y mujeres.
Cientos de familias, incluidos niños y personas con discapacidad, se han visto obligadas a huir y enfrentan condiciones humanitarias extremas, sin acceso adecuado a alimentos, agua y medicinas.
La Oficina advierte que la destrucción generalizada de edificios residenciales no parece estar justificada por una necesidad militar imperiosa y que estas acciones podrían constituir graves violaciones del Cuarto Convenio de Ginebra.
Los Estados parte tienen la obligación urgente de ejercer presión sobre Israel para que detenga inmediatamente esta ofensiva, que amenaza con causar una crisis humanitaria sin precedentes.