El novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, ha declarado ante el Tribunal Supremo en relación a la filtración de un correo en el que su abogado reconocía delitos fiscales. González Amador sostiene que su abogado actuó sin su consentimiento y se queja del daño a su reputación al ser llamado "defraudador confeso". Durante su testimonio, reafirmó que no ha cometido ninguna ilegalidad y que había informado a la Agencia Tributaria sobre su inocencia. La investigación, liderada por el juez Ángel Hurtado, está en su fase final y también incluirá la declaración del abogado de González Amador.
Alberto González Amador, novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha reafirmado su denuncia por revelación de secretos durante su declaración como testigo ante el Tribunal Supremo. En este contexto, se investiga la filtración de un correo electrónico en el que su abogado admitía delitos y sugería un acuerdo con la Fiscalía.
Según informaciones obtenidas por laSexta, González Amador afirmó que el correo en cuestión fue redactado sin su consentimiento por su abogado y reiteró que no ha incurrido en ninguna ilegalidad. “El correo fue enviado sin mi autorización, yo buscaba una solución que generara el menor ruido posible”, declaró. Además, subrayó que había manifestado a la Agencia Tributaria en dos ocasiones que no había cometido ningún delito.
El empresario también expresó su descontento por el "destrozo" ocasionado por ser calificado como "defraudador confeso", lo que ha afectado sus relaciones personales y profesionales. Aseguró que varios clientes han dejado de contactarlo para impartir cursos desde que surgió este escándalo.
Este viernes, González Amador compareció nuevamente ante el juez Ángel Hurtado, actuando tanto como testigo como denunciante. Hurtado ha incluido al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, como investigado por ser presuntamente responsable de la filtración del correo. La querella presentada por González Amador ha dado lugar a una instrucción que se encuentra en su fase final.
En esta ocasión, se espera la declaración del abogado Carlos Neira, quien es señalado por González Amador como responsable de la confesión de los delitos. Neira está citado para testificar el próximo 27 de mayo. Además, cuatro periodistas del diario El País, quienes afirmaron tener información sobre el correo antes de que fuera solicitado por el fiscal general, también deberán comparecer.
A pesar del revuelo mediático, González Amador intentó minimizar las implicaciones del caso al referirse a él como una "inspección fiscal de un particular". Durante su declaración, admitió haber enviado el correo del fiscal a Miguel Ángel Rodríguez (M.Á.R.), pero aclaró que esto ocurrió después de la publicación de la noticia en El Mundo. En ese sentido, indicó que no le dio instrucciones específicas sobre qué hacer con dicha información: “le dije 'haz lo que veas'”.
Aunque tenía la obligación legal de decir la verdad durante su declaración como testigo, González Amador evitó hacer declaraciones a los medios al llegar y salir rápidamente del Tribunal Supremo. Los periodistas esperaban fuera para obtener comentarios sobre su testimonio.
Alberto González Amador es el novio de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso y ha estado involucrado en una investigación relacionada con la filtración de un correo en el que su abogado reconocía delitos fiscales.
González Amador se ha ratificado en su denuncia por revelación de secretos y ha afirmado que la confesión de los delitos fue hecha por su abogado sin su consentimiento, sosteniendo que no ha cometido ninguna ilegalidad.
Se le investiga por presuntos delitos fiscales, incluyendo fraude fiscal y falsedad, aunque él afirma no haber cometido ninguna de estas ilegalidades.
González Amador ha expresado que ser llamado "defraudador confeso" ha causado un "destrozo" en su vida personal y profesional, afectando sus relaciones laborales y clientes.
El abogado Carlos Neira está citado a declarar como testigo sobre la confesión de los delitos. Su declaración está programada para el 27 de mayo.
González Amador admitió haber enviado el correo del fiscal a Miguel Ángel Rodríguez, pero afirmó que lo hizo después de que se publicara la noticia y dejó la decisión de publicación en manos de Rodríguez.