Desde el reinicio de los ataques israelíes en Gaza, al menos 322 niños han perdido la vida y 609 han resultado heridos. En total, se estima que más de 15,000 niños han sido asesinados en casi 18 meses de conflicto. La situación humanitaria se agrava con una creciente escasez de bienes esenciales, lo que ha llevado al cierre de 25 panaderías y dificulta la distribución de asistencia humanitaria.
Desde la reanudación de los ataques israelíes, al menos 322 niños han perdido la vida, una cifra que se suma a los 609 menores heridos desde el fin del alto el fuego. Este incremento en las víctimas infantiles es parte de un contexto devastador que ha dejado más de 15.000 niños asesinados en casi 18 meses de conflicto.
La situación humanitaria en Gaza se agrava cada día, con una escasez alarmante de bienes esenciales que dificulta la distribución de asistencia. Esta crisis ha llevado al cierre de 25 panaderías, lo que complica aún más el acceso a alimentos básicos para la población afectada.
A medida que continúan los enfrentamientos, las condiciones de vida en Gaza se deterioran rápidamente. La falta de recursos no solo afecta a los adultos, sino que los niños son los más vulnerables en esta crisis prolongada.
Organizaciones internacionales han expresado su preocupación por el bienestar infantil y han instado a un alto el fuego duradero que permita la llegada de ayuda humanitaria. Sin embargo, la realidad sobre el terreno sigue siendo desoladora, con familias luchando por sobrevivir en medio del caos.
Cifra | Descripción |
---|---|
322 | Niños muertos desde que se reanudaron los ataques israelíes |
609 | Niños heridos desde el fin del alto el fuego |
15,000+ | Total de niños asesinados tras casi 18 meses de guerra |
25 | Panaderías cerradas debido a la escasez de bienes vitales |
Al menos 322 niños han muerto desde que se reanudaron los ataques israelíes.
609 niños han resultado heridos desde el fin del alto el fuego.
El total de niños asesinados tras casi 18 meses de guerra superaría los 15.000.
La escasez de bienes vitales está impidiendo la distribución de asistencia humanitaria y ha obligado al cierre de 25 panaderías.