Tras los graves disturbios de estos días parece que todo vuelve a tranquilizarse en las distintas ciudades británicas.
Después de tres noches de altercados, Reino Unido ha tenido una madrugada tranquila dentro de lo que cabe. En la pasada noche no se han registrado incidentes graves aunque sí que se ha reconocido una gran tensión en la ciudad de Birmingham, patrullada por más de 1.000 policías.
Cabe recordar que en esta ciudad perdieron la vida tres jóvenes de origen musulmán, atropellados mientras defendían sus propiedades durante la segunda noche de altercados. A pesar de que ya se ha detenido a un hombre por este suceso, las autoridades tienen miedo de que estos tres fallecimientos causen una batalla racial. El padre de uno de los fallecidos ya se ha pronunciado al respecto negando que creyeran que se tratara de un crimen racista.
Durante esta ola de disturbios ya han sido detenidas más de 1.200 personas en Londres, Liverpool, Manchester, Birmingham y West Middlans. Por ello varios tribunales londinenses permanecerán abiertos durante esta noche para poder procesar a todos los detenidos lo más rápido posible. Las penas, de los ya juzgados, rondan las diez semanas de cárcel.
David Cameron, primer ministro británico, ha declarado que no permitirán que se instaure la cultura del miedo en las calles “necesitábamos una respuesta y hemos respondido con firmeza”.