El ministro de Asuntos Exteriores insiste en que no tiene sentido que haya un Instituto Cervantes en Gibraltar, puesto que España considera este enclave como "territorio nacional".
En declaraciones a la Cope recogidas por Servimedia, Margallo reiteró que la mayoría de los alumnos del Cervantes en el Peñón son "hijos de militares británicos". Sostuvo que estos funcionarios del país de preside James Cameron también "son hijos de Dios", pero "a lo mejor tienen que ser sufragados por el Gobierno británico", en referencia a los que quieran clases de español.
El ministro relacionó la existencia de un centro de español en la colonia británica a la política que siguió al respecto el extitular de Exteriores Miguel Ángel Moratinos, que proponía la colaboración con las autoridades del Peñón en cuestiones de utilidad para los ciudadanos, como las comunicaciones o el idioma.
A este respecto, Margallo cuestionó esta política, porque "nadie abre un instituto Cervantes en territorio nacional" y añadió que en el Peñón "todo el mundo habla español" y los residentes pueden aprenderlo fácilmente.