El transporte público de la Comunidad de Madrid se ha convertido en un referente para los planes de crecimiento de Oslo, cuyo Comité Permanente de Desarrollo Urbano ha acudido a conocer las principales infraestructuras y servicios de la región para poder adaptarlas luego a la propia singularidad de la capital noruega.
El consejero de Transportes, Infraestructuras y Vivienda, Pablo Cavero, acompañó a los 30 miembros que configuran esta delegación en su visita al Centro Integral de Transportes (CITRAM), un centro de gestión único en el mundo. Desde él, se coordinan todos los modos de transporte de la Comunidad, que implica supervisar la explotación de más de 40 operadores distintos, ofreciendo soluciones conjuntas en tiempo real ante cualquier incidencia. Estas instalaciones, ubicadas en la sede del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, funcionan las 24 horas de los siete días de la semana e integra a los 5.000 vehículos que prestan a diario el servicio de transporte público en toda la región, los 6.000 paneles de información y las 20.000 cámaras de vigilancia.
Asimismo, los representantes de la capital de Noruega conocieron cómo se gestiona todo el transporte público de la región integrado bajo la gestión única del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, y la red de intercambiadores y áreas intermodales de Madrid, teniendo en cuenta además los planes de ampliación del transporte público existentes en Oslo.
Por este motivo, han acudido también al intercambiador de Moncloa y Príncipe Pío, con el fin de conocer este modelo de estación intermodal para darles ideas para la estación que están proyectando en el centro de la ciudad, además de las ampliaciones de autobuses y líneas de metro diseñadas. Oslo tiene una red de Metro de 62 kilómetros, con 90 estaciones y 6 líneas de Metro. Pero también existe un Plan Nacional de Infraestructuras y Transporte de Noruega hasta 2023, que implica 67.000 millones de euros destinados a la construcción de carreteras, ferrocarriles, transporte costero y carriles bici.