Cornelius Gurlitt ha fallecido, tras una operación de corazón; el alemán que guardaba en su casa de Múnich 1.280 obras de arte y deja sin resolver la devolución de las obras a sus legítimos dueños.
Cornelius Gurlitt ha fallecido a los 81 años en su apartamento de Múnich tras una operación de corazón por problemas cardíacos. Gurlitt es el alemán que guardaba en su apartamento de Múnich 1.280 obras de arte, entre las que había numerosas obras que los nazis robaron a los judíos durante el Holocausto.
Las autoridades alemanas comenzaron a investigar a Gurlitt a principios de 2012, cuando el alemán fue sorprendido con una gran cantidad de dinero en un control rutinario; la investigación descubrió que Cornelius Gurlitt guardaba más de mil obras de arte en su apartamento, obras de grandes maestros como Toulouse-Lautrec o Picasso que heredó de su padre, el marchante Hildebrant Gurlitt que participó en el expolio de obras de arte a los judíos durante el nazismo.
Así, semanas después de conocer el acuerdo entre los representantes del Gurlitt y el gobierno alemán para inspeccionar las obras y proceder a la restitución de las obras a sus legítimos dueños. En cualquier caso, no se sabe si hay herederos o testamento o, si por el contrario, las obras irán a parar a manos del gobierno alemán, ni qué obras le pertenecían legítimamente. En cualquier caso, las autoridades alemanas cierran la investigación por delitos fiscales, aunque continuarán con el examen de las obras.