Los restos mortales del flamante escritor descansarán en los dos territorios que le han acogido durante toda su vida.
El premio Nobel de Literatura colombiano, Gabriel García Márquez, murió el pasado Jueves Santo a los 87 años de edad por una pulmonía. Sus restos mortales serán repartidos en los dos territorios más importantes de la vida del escrito, México y Colombia, según ha avanzado el embajador colombiano José Gabriel Ortiz.
“En México se queda desde luego alguna parte, por lo menos, y pensaría que se pueden llevar otra después a Colombia (...), y que reposaran parte de sus cenizas allá” aseguraba el funcionario colombiano tras acudir al domicilio del escritor. Gabo, como era conocido el escritor, nació en Colombia pero estuvo viviendo en México durante algunos años, por lo que sus cenizas deben estar en estos dos lugares.
Tras luchar por su vida desde el pasado 31 de marzo, García Márquez falleció arropado por su familia en su vivienda del sur de México DF, donde vivía desde hace unos años. Estuvo ingresado por un cuadro de deshidratación y un proceso infeccioso pulmonar y de vías urinarias en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas Salvador Zubirán, pero su buena evolución lo hizo volver a casa.
Sus obras son ya consideradas como un legado cultural de la literatura de la América Latina, que vivirán por siempre en las manos de los lectores que quieran conocer la realidad con sus toques mágicos. “Cien Años de Soledad”, “El otoño del patriarca”, “El amor en los tiempos del cólera”, “Crónica de una muerte anunciada” y “Relato de un naufrago” son solo algunas de sus obras que han marcado un antes y un después en la literatura universal, sobre todo en los países en los que se reflejan.