El activista opositor ucraniano, Dimitry Bulatov, que permanecía desaparecido desde el pasado 22 de enero, ha denunciado que ha estado secuestrado todo este tiempo y que ha sido sometido a torturas que han llegado hasta la crucifixión.
El activista es conocido por ser portavoz de 'Automaidan', uno de los grupos, en este caso de motoristas, que forma parte de los manifestantes que llevan meses acampados en la plaza de la Independencia de Kiev -rebautizada como Euromaidan- en protesta por la decisión del Gobierno de dar marcha atrás en la firma de un acuerdo comercial con la UE a finales de noviembre.
Su desaparición había sido denunciada el 23 de enero
De 35 años, Bulatov apareció este jueves en una localidad próxima a Kiev. Se denunció su desaparición después de que el día anterior no se tuvieran noticias de su paradero y después de que otros dos activistas opositores fueran secuestrados y uno de ellos fuera hallado muerto posteriormente en un bosque próximo a la capital con signos de tortura.
"Fui crucificado", señaló anoche en declaraciones a los medios recogidas por Radio Free Europe/Radio Liberty . "Agujerearon mis manos. Cortaron mi oreja, cortaron mi cara. No hay un solo punto de mi cuerpo que no esté herido. Lo podéis ver vosotros mismos, pero estoy vivo gracias a Dios", explicó, con la cabeza y la cara ensangrentada.
El Ejército se pronuncia
El Ejército ucraniano se pronunció este viernes tras dos meses de silencio sobre la grave crisis ucraniana y pidió al presidente del país, Víktor Yanukóvich, que tome medidas urgentes para evitar que se ponga en peligro la integridad territorial del Estado.
En un comunicado, del Ministerio de Defensa se calificó de "inadmisible" la toma de edificios gubernamentales por parte de la oposición y "los impedimentos puestos a los representantes de los órganos de poder estatal y local para cumplir sus obligaciones".
Los militares subrayaron que "la escalada de la confrontación amenaza la integridad territorial del Estado". Y mientras la oposición dejó de momento sin reacción la preocupación de los militares, el presidente ucraniano promulgó también este viernes la revocación de las leyes represivas que causaron los disturbios en Kiev la pasada semana y también la amnistía condicionada para los detenidos durante las protestas de los últimos dos meses.