Nueve días de la huelga de limpieza en Madrid, que tiene a la capital de España sepultada en columnas de basura y el Partido Popular ya ha tenido que salir en defensa de Ana Botella.
Y es que el estado de la capital y otras polémicas pasadas han acabado de hacer trizas la imagen de la alcaldesa Ana Botella y sus posibilidades de ser la candidata municipal del PP en 2015.
Ya no es sólo la oposición, los sindicatos y los empresarios los que cuestionan la capacidad política de la regidora ante las distintas crisis que le ha tocado gestionar (el drama del Madrid Arena, la pérdida de Madrid 2020 y ahora, la huelga de recogida de basura); también en su propio partido han acabado reventando las ya débiles costuras que protegían a Botella y ya algunos dirigentes conservadores piden a la responsable municipal que intervenga para poner fin a un paro que se está llevando por delante la ya deteriorada imagen de Madrid y, por extensión, la de la Marca España en la que tanto esfuerzo ha puesto el Gobierno de Mariano Rajoy.
Las críticas internas en el seno del PP contra la alcaldesa han llevado a que, esta mañana, la dirección nacional del partido haya tenido que salir en defensa de la gestión municipal tratando de aplacar los ánimos internos, sobre todo.
El secretario ejecutivo de Política Local, Manuel Cobo —exnúmero dos de Alberto Ruiz-Gallardón, precisamente, cuando éste era alcalde de Madrid—, ha asegurado que el PP "apoya al Ayuntamiento de Madrid y a su alcaldesa, Ana Botella, que están cumpliendo la ley y sus obligaciones y exige el cumplimiento de los servicios mínimos".
Cobo quería así acallar las críticas que, desde su propio partido, no tienen reparo en criticar públicamente la gestión del consistorio de la huelga de los servicios de limpieza que comenzó ya el martes de la semana pasada.
Y es que parece que los nervios en el PP están a flor de piel al asistir impotentes sus dirigentes a las informaciones sobre la sucia imagen de Madrid en la prensa internacional, con fotografías y críticas más que ilustrativas de la crisis.
Ana Botella contra los trabajadores
Tras nueve días sin anunciar ninguna medida más allá de velar por el cumplimiento de los servicios mínimos, la alcaldesa de Madrid ha decidido intervenir en el conflicto con un ultimátum para que empresas concesionarias y sindicatos lleguen al acuerdo que permita poner fin a la huelga de limpieza viaria y jardinería.
"Si en 48 horas no alcanzan un acuerdo, la empresa pública Tragsa se encargará de cumplir los servicios mínimos". Así lo ha comunicado Botella en una rueda de prensa convocada a última hora.